Capítulo 47

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-Alexandra, ¿Qué haces con mi teléfono?-miro asustada hacia la puerta, donde está Brandon serio y de brazos cruzados.

-Yo...yo....

-¿Y bien?-me he quedado escasa de escusas. Piensa rápido Skyler, salva tu cuello.

-Veía si desde aquí coge señal, no vaya a ser que mamá llame y se preocupe.-Brandon se quedó callado y se acercó a mí. Que se lo crea, que se lo crea...

-No puedes coger las cosas de los demás sin permiso.-me quitó el teléfono.

-Si, lo siento.

-Solo no lo vuelvas a hacer.-me pellizca la mejilla y rio, sin ganas. Luke no me ha creido. Fisicamente estoy bien, emocionalmente estoy fatal.-Dentro de un rato vamos a ir a almorzar con los chicos en la ciudad.

-No tengo hambre.-me dejé caer en mi cama.

-¿Te sigue doliendo?-se sentó a mi lado y asentí, con los ojos cerrados.-Si no comes nada, te va a seguir doliendo.

-No me digas, eso me dijiste con el desayuno y sigo igual.-me di la vuelta quedando de espaldas a él. Me agarré la barriga con ambas manos.

-Intenta dormir un rato, haber si se te pasa. Luego te avisamos.-me da un beso en la mejilla y me deja sola en la habitación.

Busco si se ha dejado el teléfono en la habitación, pero no. Se ha llevado mi vía de escape. El estómago no para de dolerme, Luke no me ha creido y estoy en la otra punta del mundo. Tienen que estar todos tan preocupados por mí...

Intenté dormir un rato. Cuando lo estaba consiguiendo, Derek viene a la habitación para avisarme de que nos vamos. No tengo ganas de nada.

-¿Listos?-todos dicen que sí, menos yo.

-Yo me quedaré con ella, tampoco tengo mucha hambre.-dice Diego.

-¿Seguro?-le pregunta Dylan.

-Sí, no os preocupéis por mí.

-Puedo quedarme sola.

-No, Alex.-los chicos se despiden de nosotros y se van.

-Te voy a preparar una infusión, haber si se te pasa el dolor.-fue a la cocina y le seguí. Empezó a mezclar cosas, mientras yo me senté en la encimera a observarlo. Tiene un culito... ¡Qué dices, Skyler! Ya tienes al culito de Luke para ti sola. Y el de los chicos. Pero este no es el caso.

Diego termina de mezclar los ingredientes y me va el vaso, lleno de hierbas. Me lo bebo en un momento y le devuelvo el vaso.

-¿Te sientes mejor?

-Un poquito.

-¿Ves? las recetas de la abuela siempre funcionan. Luego fuimos al salón e hicimos zapping.

-Diego.

-¿Si?

-¿Tú crees que soy Alessandra?


Mis Siete Hermanos y Yo (L.H) #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora