Tartamudo

Capitulo 25: Ryeonguu

Me maldije mentalmente, moví inquieto las manos, despeine mi cabello, respire nervioso estoy justo en frente de las mismísimas puertas de la facultad de derecho, mis clases ya habían terminado pero por alguna razón no salí directamente si no que termine caminando hasta aquí.

mordí con desesperación mis uñas, me sentía ridículo subiendo y bajando los escalones con indecisión, algunas personas pasan por mi lado todas inmersas en su mundo para mi suerte, una parte de mi quería salir corriendo, ir a casa, hacer como que nunca paso nada, pero otra parte estaba curiosa por saber que estaba haciendo en estos momentos yesung; aun cuando lo más evidente es que este en medio alguna clase.

De golpe me detuve en el cuarto escalón, suspire y gire sobre mis talones dispuesto a ir me, esto era una mala idea, mi celular vibro insistentemente en el bolsillo de mi pantalón, provocando que diera un pequeño saltito.

Introduje la mano en el bolsillo extrayendo el aparato, sin mirar la pantalla inmediatamente respondí la llamada, de esa manera dejaría de ser un molestia; con los pies juntos salte al tercer escalón.

--Di-di-ga.

--¿Canguro o saltamontes?- susurro una profunda voz al otro lado de la línea, fruncí el ceño confundido; pies juntos y salte de igual manera al segundo escalón.

--eh...

--Deja de morderte las uñas, es desagradable- libere lo que me quedaba de uñas, mi mano cayo aun costado, observe a mi alrededor, nadie -Arriba- susurro de nuevo, mire inmediatamente al cielo, una ligera risa se escuchó- en la ventana.

Pasee mi mirada por todas la ventanas, hasta encontrar esa ya tan conocida cabezota, yesung sonreía y sacudía su mano ligeramente tratando de no llamar mucho la atención.

La sorpresa hizo que me resbalara, por suerte logre ingeniármelas para no caerme sin embargo me doble el pie pero no lo suficiente como para lastimarme seriamente- casi te caes – torcí la cabeza hacia un lado.

--Si-i- respondí cortante.

--¿No deberías estar en clase?

--y tu-u pre-estan-an-do aten-ten-ción- yesug se rio negando, se irguió en su puesto, ya que estaba recostado sobre la mesa, no tenía el celular en las manos pero no corto la llamada, creo que lo atraparon, yesung asentía y al parecer hablaba, luego regreso a su posición anterior- nos vemos en cinco.

--Que-e – Yesung corto la llamada y se levantó tomando sus cosas, mire el reloj en mi muñeca aún faltaba mucho para que la clase terminara, continúe observando la ventana, yesung ya no estaba.

Acomode la maleta en mi espalda, acomode mi cabello y patee una piedrecilla, a que se refería con nos vemos en cinco; la respuesta apareció ante mis ojos yesung salía por las puertas que minutos antes observe con insistencia traía su maleta y sostenía un libro gigantesco con uno de sus brazos.

--Vamos- dijo pasando junto a mí.

Yo lo seguí con la mirada mas no me moví ni un centímetro- Que esperas...vamos.

Lentamente me acerque junto a el-¿a do-donde? – pregunte, yesung cambio el libro a su otro brazo, sacudió el que ahora era libre y tironeo de mi brazo, caminaba rápido, yo me sentía torpe enredándome con mis propios pies, su mano inicialmente estaba en mi codo de ahí se corrió a mi antebrazo y por último se detuvo en mi muñeca a milímetros de ir sujetando mi mano, estaba ruborizado era mi primer contacto conociendo... mis... sentimientos... por él.

Para cuando lo note estábamos bajando lo escalones que se encuentran, saliendo de la universidad.

Yesung soltó su agarre, para contestar una llamada; yo caminaba a unos cuantos pasos de distancia respirando profundo para tratar de llenar mis pulmones de aire, mi respiración estaba agitada y no se si fue por caminar-correr o por el anterior contacto en mi muñeca.