Recuerdo un día, yo apenas tenía 22 años, me acababa de separar de mi primer marido, estaba mal muy mal, tanto que descubrí q cuando uno está tan mal no tiene nada que temer.
Recuerdo ese día por ser el primero en toda mi vida que fui capaz de montarme en una montaña rusa, en la noria, de beber sin miedo a perder el control.
Ese día pase de la ansiedad a la depresión, me daba igual morirme.
Mi vida no tenía sentido, no había nada ni nadie que pudiera levantarme, estaba hundida y enterrada en mi misma.
Con mucha ayuda y mucho esfuerzo pude hacer una remontada, tuve épocas mejores y peores pero la mayor parte del tiempo estaba bien...
Con el tiempo comencé una nueva vida y con ella venía mi primer hijo, un ser maravilloso que desde que supe que me había elegido como madre me hizo sentir la más feliz del mundo.
Os aseguro q no hay sensación más maravillosa que ver cómo alguien tan pequeño té puede dar tantas fuerzas para vivir.
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Como sobrevivir a la ansiedad
De TodoTodos los que algunas vez hemos sentido ansiedad sabemos lo mal q se pasa. Se acelera el pulso, necesidad de huir, escalofríos, mareos, náuseas, diarrea... Si ya cuesta vivir así, que sucede cuando le añadimos otros problemas.