Enfermo

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"Owww Ez te ves tan joven como JD."

"Señor Tanner ya le he dicho que mi nombre es Ezra y le agradecería que lo utilice."

Josías frunció el seño mirando a Ezra. Ya había visto varias veces que lucía muy joven pero esta vez la duda se instaló en su mente. Cómo era posible que este muchacho se vea tan joven.

"Ezra te sientes bien te veo muy pálido y te he escuchado toser y estornudar varias veces. Será mejor revisarte."

"Gracias señor Jackson pero me encuentro perfectamente bien y no será necesaria revisión alguna."

Ezra mintió porque se sentía terriblemente mal pero las apariencias lo son todo es lo que su madre le había enseñado y nadie quiere a los enfermos así que siempre ocultaba sus enfermedades de los demás por miedo a que pensaran que era débil.

"Señores por favor a mi oficina.

Ezra y yo empezamos un trabajo encubierto como padre e hijo. A partir de este momento él es Ezra Larabee y vivirá conmigo, asistirá a la Universidad y esperaremos que en pocos días la banda de criminales lo contacte para que se les una. Nadie debe saber de nuestros personajes y Ezra solo vendrá a la oficina para visitar a su papá. Es muy importante mantenerlo vigilado po..."

"Un momento señor Larabee. No es necesario que me vigilen todo el tiempo yo sé hacer mi trabajo muy bien y sé cuidar de mí mismo. Tampoco es necesario que vivamos juntos. Yo puedo seguir en mi apartamento y durante el día actuaremos nuestro papel." Ezra estaba malhumorado por el dolor de cabeza y de cuerpo y además no le gustaba que estar vigilado porque estaba seguro que ni Cris ni el resto del equipo lo dejaría acudir a los casinos clandestinos.

Cris ignoró por completo la pequeña rabieta. "Bien ya es tarde, Ezra y yo tenemos que irnos a casa. Mañana es sábado y los espero en la noche en el rancho. Vamos Ezra hora de irnos."

Ezra sentía su enojo aumentar. Cómo es posible que lo trate así, no era un niño.

Cris vio que Ezra no se movía y decidió actuar. Lo tomo del brazo y casi lo arrastró al parqueo.

"Señor Larabee puede dejar mi brazo por favor y creo que no es necesario que vivamos juntos."

"YA BASTA EZRA. Cris se veía molesto. Primero deja de llamarme por mi nombre ya te dije que debes llamarme papá y segundo tenemos que vivir juntos por que esta banda nos está vigilando y si no están seguros de que somos padre e hijo no te van a contactar y no podremos detenerlos. Ahora deja el berrinche y sube al auto."

*Yo no hago berrinches.* Pensó Ezra pero al ver el seño de Cris decidió obedecer.

El viaje fue muy silencioso. Cris manejaba mientras se preguntaba qué diablos le pasaba a Ezra parecía que junto con la ropa se había puesto una actitud de adolecente rebelde. Por su lado Ezra se recostó a la ventana con los brazos cruzados sobre su pecho. Realmente lo que más le preocupaba era su gato y quién lo iba a cuidar si no llegaba a su apartamento. Por la noche e incluso el sábado no habría problema ya que acostumbraba dejarle alimento para 2 días pero estaba seguro que para el domingo ya no tendría que comer. Todo su cuerpo le dolía y ahora sentía muchas ganas de vomitar.

"Bien hijo esta será tu habitación. Mañana iremos a comprar el resto de ropa que vas necesitar y algunas cosas para adaptar la habitación a tu gusto. Ahora voy a hacer nuestra cena. Refréscate y descansa un poco, te llamaré cuando este lista. Te sientes bien? Te veo muy pálido. Déjame ver si tienes fiebre."

Ezra rápidamente se apartó para evitar que la mano de Larabee tocara su frente. A estas alturas sabía que estaba realmente enfermo y había luchado varias veces contra el impulso de estornudar.

"Larabee de verdad estoy bien. Déjame tranquilo hombre no entiendo por qué la insistencia."

"Esto fue suficiente." Un Cris muy molesto se acercó a un Ezra visiblemente intimidado. "Ahora jovencito ya no puedes descansar por el contrario te vas a sentar aquí y vas a escribir 200 veces "no llamaré a papá por su nombre y si lo hago me castigará"." Tomó a Ezra de un brazo y lo sentó en la silla frente a un escritorio. "Aquí tienes papel y lápiz. Te llamaré aproximadamente en una hora y espero que hayas terminado tu castigo." Cris se fue dejando a un sorprendido jovencito con la boca abierta.

*En qué me metí. Será mejor que escriba esas estúpidas oraciones. No lo puedo creer, me castigó, me castigó como un niño. Por lo menos no me golpeó como los tíos con los que mamá me dejaba.* "Uhhh! Este escritorio es tan incomodo. Claro por qué es para un niño pequeño." Ezra terminó las oraciones con una mueca en la cara. Eran oraciones para un niño. Luego se acostó e inmediatamente se quedó dormido.

Ya habían pasado 40 minutos desde que dejó a su hijo castigado en su cuarto. *Debo ser estricto con él. Un error y podría costarnos no solo la operación encubierta sino que podría salir herido o peor. Esta banda debe ver a un padre y un hijo. La verdad es que no me siento bien con este papel, no tenemos suficiente confianza como para actuar esos papeles. Mañana lo llevaré de compras y pasaremos un poco de tiempo juntos, tal vez eso nos ayude. Será mejor ir a ver a mi hijo.* Extrañamente la idea no le molestó y tampoco que Ezra fuera a usar la habitación de Adam, su hijo muerto, incluso estaba pensando en cambiar la decoración y esto dejó a Cris sorprendido.

Dormido, sudando y temblando fue como encontró a Ezra y cuando le toco la frente se sorprendió de lo caliente que se sentía.

"Ey amigo! Te sientes mal?" Preguntó Cris mientras sacaba su celular para llamar a Nathan.

"No! digo si!, me siento bien. Siento haberme quedado dormido. En qué puedo ayudarlo?" Ezra trató de levantarse pero inmediatamente se sintió mareado y con ganas de vomitar. Trató de llegar al baño pero no lo logró y vomitó en el suelo para su horror.

Cris observó la escena sorprendido. Rápidamente dejó el celular y se aproximó a levantar a Ezra pero lo que sucedió lo sorprendió aun más.

Ezra al darse cuenta que Larabee se acercaba instintivamente se hizo un ovillo cubriéndose la cara. "Nooo por favor no me golpes! No lo volveré a hacer, lo prometo!."

"Oye oye no pasa nada, no te preocupes Ezra, yo jamás te golpearía por estar enfermo. Vamos a la cama. Toma cámbiate esa ropa. Voy a llamar a Nathan." Cris ayudó a Ezra que se sentía horrorizado de ser demasiado débil para su jefe y que lo traslade de equipo. Pero por otro lado se sentía bien de que alguien se preocupara por él y de no estar solo en su apartamento.

"Nathan hola. Puedes venir al rancho. Ezra está enfermo, tiene fiebre, está mareado y acaba de vomitar. Si si te espero."

"Bueno Cris déjame decirte que tienes un chico muy muy enfermo. Aquí tienes la receta de los antibióticos. Que coma antes de tomarlos y debes darle muchos líquidos. Debe tener mucho reposo, nada de computadora, ni siquiera televisión, por lo menos por 2 días solo debe dormir. Debe estar en la casa durante 5 días por lo menos."

"Claro Nathan no te preocupes por 2 días solo se levantará de la cama para ir al baño y los siguientes 3 días me aseguraré de que no se agote mucho. Gracias por venir."

Durante la noche Cris comprobó a Ezra varias veces.

*Larabee que te pasa con este muchacho. Porqué te siente tan protector?* Cris no podía dejar de pensar.

Ezra sintió como Cris comprobaba su fiebre pasándole la mano por la frente y se sentía bien.

*Nunca he tenido un padre pero podría aprovechar este tiempo y tener uno. Madre siempre me enseñó a aprovechar las oportunidades. Eso haré. Tendré un papá mientras pueda. Sí eso haré.* Pensó Ezra y se quedó dormido disfrutando de la sensación de ser cuidado por alguien.

Papa de nuevoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora