Capitulo 11

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Narra Jorge.

El dolor que tenia en el pecho era insoportable. No podía parar de llorar desconsolado en mi casa. Nisiquiera tenia ganas de prender la TV ya que pasaban cualquier reporte que me hacia acordar a mi madre. Bueno cualquier cosa me recordaba a ella. Si en cada esquina de mi enorme y solitaria casa habia una foto de ella, o yo con ella.

Dios! La extraño....Y necesito de su presencia.

Lagrimas de fragilidad volvieron a salir sin permiso de mis ojos. Desconsolado comenze a sollozar,fuerte. ¡Me importaba una mierda que me escucharan llorar! Porque es mentira,es mentira que los hombres no lloran, cualquier hombre que amo va a llorar cuando pierde a alguien que amo con su alma. Y yo habia perdido a la que me llevo nueve meses en su vientre y formo mi corazon, y me dio algo de que vivir.

Narra Martina.

Habia llegado a las Fuerzas de USA.  Ruggero me había traído,  y me había dicho que si quería podía empezar a ver un psicólogo por lo sucedido.  En un rato me llevarían a mi casa.

Llegue y mi madre corrió hacia mi, al igual que mi padre y mis amigos.

-Dios hija te amo, te amo-dijo mi madre dándome besos, y viendo mi cuerpo de pies a cabezas a ver si tenia algun rasguño. Después le explicaría. 

Después de que todos me dijieran que me habían extrañado, y que me amaban. Me fui a la habitación. Me quedaría acá por unos meses,  ya que Ruggero le dijo a mi mama que podía deprimirme y llegar a suicidarme. Y cuando terminara mis consultas con el psicólogo  pues volvería a mi casa. Y por los momentos estaría en casa de mis padres. Tome una toalla y me dirigí a la ducha, Dios apestaba. 

Las gotas de agua se mezclaron con mis lagrimas, al notar los moretones en mi cuerpo y el dolor aun permaneciente en mi entrepierna. Eche shampoo en mi cabello unas 4 veces. Al pasar el jabón por mi cuerpo los moretones me dolían, y me hicieron gemir del dolor. Rapidamente mi rostro se hizo de lagrimas. 

Salí de la ducha  y me mire al espejo del lavabo. Ya no era la misma, y me costaría recuperar mi vida. Dios 6 meses encerrada. Medio año..... Por suerte, todo ese tiempo estuvieron suspendidas las clases. Mis ojos estaban hinchados a causa de tanto llorar. Me puse una pijama, dormiría un buen rato. No quería que me hablaran ni me interrogaran. Quería dormir sabiendo que no amanecería violada, ni muerta. Quería dormir en mi cama, abrigada, sin frió, sin preocupaciones. Pero lamentablemente mis preocupaciones aumentaron cuando llegue a casa, a causa de que mi vida, JAMAS volvería  ser lo mismo.

Mañana enterrarían a Cecilia...Dios santo....La extraño, y mucho.

Me la pasaba encerrada en mi cuarto. Llorando... Y llorando, debería de estar feliz... ¿Pero como? Habia perdido a 2 personas importantes, y me habían violado. Por suerte, Ruggero me dijo que fuera un dia con el para poner una denuncia.

Mis ojos se fueron cerrando cuando las lagrimas se apoderaron de mis ojos al recordar lo sucedido. 

Y así caí en un profundo sueño...

***

-Hija,no se si te importe pero llevas durmiendo mas de 12 horas ...Y falta media hora para el entierro de Cecilia.-dijo mi madre.

-¿Que? -dije soñolienta- Ah voy...

Fui a la ducha, y me duche rápidamente. Me puse un vestido negro. Y deje mi cabello suelto para que se formaran ondas naturales. Puse un poco de polvo en mi rostro para ocultar ojeras y moretones. Tome unas gafas negras y las guarde en mi pequeño bolso. Ruggero vendría por mi. Agarre mi Iphone que permaneció 6 meses en mi mesita de noche. Tome el papel en el que Ruggero había dejado su numero y lo guarde en mis Contactos.

"Amor En Guerra"-Jortini.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora