Capítulo 40:

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Luego de las locuras de Christie, las chicas fueron a sus casas a buscar lo que necesitarán para quedarse en la casa de Christie, Christie me llevó a mi casa y yo buscaba como loca cosas en mi armario y ella me observaba sentada en mi cama.

-Bri, ¿qué tanto buscas? Sólo necesitas una pijama, tu cepillo de dientes, ropa para mañana... Ah, y una ropa que no te importe ensuciar.
-Eso no es todo, Christie, también necesito a mi osito polar, mi cobija gruesa, una almohada... Necesito un montón de cosas.
-Bueno, ten a la mano todo lo que necesitas, y no olvides la cámara.
-Claro, la cámara, tenla tú porque sé que la olvidaré.-Le di la cámara.

Encontré un bolso grande, lo abrí y metí todo lo que necesitaría ordenadamente: mi cobija, mi pijama, unos calcetines gruesos por si me da frío, una ropa para mañana, otra ropa blanca que no me importaría ensuciar, zapatos, mis pantuflas, mi cepillo de dientes, una toalla, jabón, champú... Podría necesitar una ducha en el momento menos esperado. Mi oso polar y mi almohada los llevaría en la mano.

-Creo que es todo.-Dije.
-Bien, ¿no tienes algunas cosas comestibles?
-Sí, puedo llevar algunas cosas, en mi bolso aún queda espacio.

Bajamos a la cocina, tomé varias cosas al azar y las metí en mi bolso.

-Oye, si vas a llevar a Miu, tienes que llevar su comida.
-Cierto. Le llevaré su leche y su comida.

Metí el empaque del alimento de Miu en mi bolso y un litro de leche, esa gata es como mi hija no humana: la cuido más de lo que debería.

-Listo, vamos.-Me dirigí a la puerta con mi almohada y mi oso en las manos.
-¿Y vas a dejar al gato?-Christie cargó a Miu.
-Oh. Cierto, me odiaría si la dejo sola.
-Yo la cargaré por ti, ya llevas suficientes cosas.

Salimos de mi casa, puse las cosas en la cajuela y me senté en la parte de atrás con Miu, ella estaba muy tranquila dormida en mis piernas.

¿Un error o una bendición? (En Edición.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora