Formas de un Apocalypsis

El Villano de esta Historia

¿Qué es lo primero que piensas cuando escuchas esta palabra? ¿Piensas que algo le ocurrió a la tierra y por esta razón fuimos separados para que los errores no se volvieran a cometer? ¿Quiénes decidieron que esto era lo mejor? ¿Los poderosos? ¿Los débiles? ¿Por qué? ¿Para qué?

Respuestas: Destrucción, sí, sí, no, por sus huevos, para sus propósitos.

¿Quién no recuerda Zombie, de The Cramberries?

Dice tantas cosas ciertas, pero todo mundo la ignora, es una maravillosa canción la cual a decir verdad, escucharla hoy en día te mete en grandes problemas, la verdad es que no puedes escuchar canciones que tengan un mensaje contra las fuerzas opresoras, eso si tienes cómo escucharlas. Los celulares no funcionan, lo cierto es que dejaron de existir, no hay electricidad en todas partes, tampoco petróleo para sacarlo, el petróleo fue lo que para empezar nos ocasionó llegar a este extremo. Pero creo que es mejor comenzar desde el principio para darme a entender.

Mi nombre es: Dominique DuLac y soy algo así como el villano de esta historia, el único que se atrevió a desafiar a los superiores y cuestionar las medidas que fueron tomadas por los poderosos los cuales a su manera de ver, nos salvaron. Cuando una explosión en un ducto petrolero perteneciente a la nación más poderosa, hizo que todos descubrieran que esta se encontraba unida a muchos otros ductos por medio de los cuales robaban el petróleo, no peor no quedó ahí. Como dije, todo estaba unido, era una cadena, un domino que reaccionó de la peor manera, estallando todo, estallando pequeños ductos, hasta los más grandes, y la tierra se convirtió en un volcán.

Dios dijo que nunca volvería a destruir a la humanidad con agua. Pero fue de esa manera, a como el gran gobierno quiso hacerlo ver todo. Todo es culpa de Dios, fue lo que dijeron. Y es que luego de detonar los ductos y convertir la tierra en un hervidero, el mar se vino sobre la humanidad, ahogando ciudades bajas, costas y cuánto pudo. Y surgieron ellos, criaturas de las profundidades que habían sobrevivido a las eras, escondiéndose en las profundidades esperando porque sabían que si una vez habían gobernado, lo volverían a hacer.

Así que los poderosos con su dinero crearon una especie de nave aérea que salvara a la humanidad. Hacía tiempo que ellos habían notado que podíamos vivir en otro planeta, no tendríamos tanta agua, pero ¿para qué querríamos agua si nos podría ahogar? Deberíamos arriesgarnos a tener uno o dos hijos como mucho, pero los que tenían dinero, siempre habían tenido como máximo tres, ¿para qué querrían más? Los que no tenían dinero eran quienes tenían tantísimos hijos y no podían mantenerlos, ellos fueron olvidados en la tierra.

Lo que nunca imaginaron los poderosos era que los bancos para soltarles el dinero, pedirían llevaran a algunas personas. Los ricos aceptaron llevar personas que carecían de dinero, pero los llevaron como esclavos. El vaticano fue demolido y sus riquezas repartidas a los ricos, terminó su convivencia con la humanidad, prácticamente los dejaron fuera, alegando que Dios había mentido y había sido Él quien envió la catástrofe. La esclavitud volvió a existir. Y todos emigramos a este nuevo mundo con una mejor esperanza.

Pronto los ricos vieron que sus riquezas desaparecían y emplearon reglas para fraccionar. Creyeron que era la mejor manera.

Los pobres tenían la peor parte.

Si tenían hijos: el primero se convertía en esclavo; el segundo era alimento; el tercero viviría con sus padres y se casaba con alguna mujer de su "calidad"; el cuarto era alimento; el quinto se convertía en soldado a los trece años; y si tenían más, eran alimento. Sí, canibalismo por decirlo de alguna manera.

Los de clase media: el primer hijo se convertía en soldado a los trece años; el segundo era destinado a servir en una casa, no como esclavo pero sí para ser humillado; el tercero se quedaba con sus padres y trabajaba en la tierra, es decir, cosechando; el cuarto se dedicaba a cualquier otro oficio que normalmente era componer canciones o pintar cuadros falsos de un gobierno falso.