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...

-Brooke, ya te dije que dejes mis cachetes en paz- sonrió tratando de quitar mi mano.

-¡Hey! Pero es que no ves que son adorables...- lo seguí molestando.

-¡Basta!- dijo riendo.

-Ash, no aguantas nada- me cruce de brazos y seguí tomando de mi jugo.

-Ya... No te enojes- me besó la mejilla y me abrazo por la cintura, a lo que no pude evitar sonreír.

-Jos ¿No deberías estar en tu clase?- dije mirándolo y soltando una pequeña risita maliciosa.

-¡Caracoles! Tienes razón- se levantó rápidamente del comedor -Adiós- me besó la mejilla y se fue.

Me lo imaginé corriendo hacia la clase y tropezando con todo mundo.
Reí ante mi absurdo pensamiento y seguí bebiendo de mi jugo.

-Hola Brooke-

Me di la vuelta y ahí estaba Mario, el chico con la sonrisa más hermosa que haya visto jamás...

-¿Puedo sentarme?- pregunto mirando el asiento a lado mío.

-Ah sisi.. Adelante- contesté.

Santísima miércoles ¿Qué se supone que debo hacer ahora? Si yo fuera Jos en estos momentos seguro diría »Que onda hermano« y chocaría las manos cual macho pecho peludo... Pero no, sólo soy yo, _____ Brooke, una chica de 17 años que tiene a Mario Bautista al frente y no sabe que hacer.

-¿Cómo estás?-

-Bien ¿Y tu?-

-Ahh.. También, oye- se rascó la nuca.

-¿Qué pasa?- alcé una ceja.

-Quería invitarte a mi fiesta, pronto cumplo 18 y será en mi casa- sonrió -Mis padres están de viaje y me dejaron hacer una mega fiesta-
-Suena genial-

-Va a haber D.J, bebidas, será una noche de locos- rió.

-Que bien- sonreí.

-Entonces ¿Irás? Puedes llevar a quien quieras-

-Claro ahí estaré-

Escuché unas risitas de otra mesa, los amigos de Mario se estaban secreteando cosas.
Mario es uno de los chicos más populares de la Institución, al igual que Jos y la mayoría de mis amigos.
Algunos incluso dicen que yo también soy popular, pero la verdad retiro las etiquetas de mi lista de cosas importantes.

-¿Qué les pasa?- pregunté riendo.

-No se...- se rascó la nuca -Oye..-

-¿Mande?-

-Mira..- señaló con su dedo hacia una dirección que no logré distinguir, giré mi nuca hacia esa dirección.

-Yo no veo na...- tomo mi barbilla y unió nuestros labios.

Durante el beso tenté la mesa del comedor con mis manos y ahí estaba »Mi sagrado jugo de naranja« ágilmente quité la tapa del envase con uno de mis dedos y en pocos segundos derramé todo el líquido encima de Mario.

-¿Quién te crees? No por estar guapo puedes besar a quien quieras- me levanté de la mesa y el se quedó helado viendo como sus "amigos" se reían de él.

Tomé mis cosas y caminé por los pasillos, dejando al chico derramado de jugo de naranja atrás.

-Oh, ahí estas ____, no creerás lo que acaba de pasar- dijo mi amiga Sofía tomándome del brazo.

-¿Qué?-

-Le derramaron jugo a Bautista y...- se interrumpió a ella misma -Oh, espera... Fuiste tu- dijo mirando el envase de jugo vacío en mis manos.

-Si, fui yo, se quería pasar de listo- me reí y tire el envase a la basura.

-Pero... Tienes que contarme que pasó-

-Será después Sofi, debo ir a mi clase- sonreí.

-De acuerdo, nos vemos-

Me fui a mi salón de clases y tomé mi asiento de siempre, la verdad es que los alumnos se podían sentar donde quisieran, pero siempre escogía el mismo lugar.

El lugar que tomo todos los días que me toca en esta clase se encuentra a lado de un ventanal enorme que da vista hacia el jardín, en verdad es una hermosa vista.

Entonces giré mi cabeza , mirando a los arbustos y ahí estaba él...

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Holaaaa.
Espero que este primer capítulo sea de su agrado.
Votos y comentarios son recibidos con harto amor.

Best Friends | ↠ J. C Donde viven las historias. Descúbrelo ahora