Un domingo por la tarde

Reunion

Estábamos yendo a nuestra reunión dominical, como siempre, yo iba con Jaime, Feña y Silvia. Cómo íbamos temprano llegamos a eso de las 6 y media, ya atardeciendo, nos encontramos con Agustín quien nos saludo y explicó porque se había atrasado su hermano. "Le dio por estudiar, así que llegará más tarde" dijo. Nos entretuvimos charlando sobre una nueva serie que daban en televisión y así hasta que por fin llego Felipe. "Así que ahí llego el estudioso" dije en tono burlón, él se lo pensó y dijo "Que bueno que llegues a una reunión Nico, casi nunca vienes" empezando a sonreír "Solo falte dos veces, este va a ser tu quinto atraso Feli, nosotros también nos cansamos esperándote" replique. "Bueno, vinimos a reunirnos o a discutir, mejor vamos ya a mi casa que se va a oscurecer" Dijo Agustín. Dicho y hecho, ya que inmediatamente fuimos a su hogar, nos estaba esperando su mama, que amablemente nos pasó budín para que comiéramos, luego fuimos a la salida donde ya estaba la psicóloga, Claudia "Al fin llegan chicos, me estaba aburriendo" Nos sentamos y le preguntamos de que hablaríamos hoy. " Bueno, hoy vamos a hablar de algo que quizá no les guste pero importante para seguir con la terapia, hablaremos de su vida pasada, su familia y toda su infancia" Note como varios rostros se tensaban y yo también sentí algún escalofrío, ¿Porque hablar de esto, si se supone que los tenemos que superar? Tuve que decir estos pensamientos en voz alta ya que Claudia replicó "Es sumamente importante que sepan los pasados de sus amigos y mirar atrás y preguntarte cómo llegué acá, con esa respuesta tú vas a poder superar varios problemas en tu vida" Sonriendo carismática mente empezó a decir "Bueno, ya que alguien tiene que empezar que sea la dama de acá, Silvia" Empeze a preguntarme qué fue su pasado y me entro una intriga enorme de saber... Cómo llegó hasta acá, sinceramente a pesar de ser su amigo, no sé cómo fue su vida, porque tuvo que venir al reformatorio... Me avergonzó de mí mismo que al pensarlo bien no conocía nada del pasado de ellos... Tal vez fue un poco hipócrita al pensar lo bien que lo pasábamos juntos, sin detenme y preguntarle ¿qué es de tu vida? Como fue su niñez... Ahora podré responder a esas incógnitas que me atormentaron esos segundos en los que Silvia se preparaba para hablar.