Le Entregue Mi Corazón Un Gangster

me estare enamorando?

Me levanté aturdida gracias a la pesadilla que me hizo recordar la desgracia que me atormentaba todas las noches. Mire la hora en mi teléfono y busque con la mirada a mis hermanos y no los encontré, ni a ellos ni a Justin y me preocupe.

Estupido gánster de pacotilla! Seguro se fue y me dejó aquí abandonada como venganza! Ahora que le diré a mi madre. " Hola madre es Liah te aviso que mi supuesto novio se ha ido con los niños y me ha abandonado aquí en el parque, espero no te enojes" juro vengarme cuando lo encuentre! Pensé mientras caminaba en una dirección al azar. Iba pasando por un centro de actividades hasta que escuche tres voces que reconocía perfectamente. Abrí lentamente la puerta y me encontré con todo un espectáculo allá dentro. El lugar estaba decorado como un antiguo barco pirata, una piscina llena de tiburones inflables y en una parte se encontraban Sissy y Ethan vestidos de piratas mientras que Justin estaba disfrazado de Capitán. Una pequeña risa salió de mi boca al verlo lo ridículamente adorable e infantil que se veía.

Ajá! Así que tenemos intrusos? Digaos vuestro nombre damisela- me habló en un acento español antiguo que hizo que mi corazón palpitara a mil por hora y me pusiera nerviosa.

Me llamo Liah mi señor y he venido de paso por aqui- le contesté intentando imitar su acento pero me quedo horrible y el solo rió.

Deberá quedarse con vosotros, vos ya sabe vuestro plan y no podemos dejarla libre cierto compañeros?!- se dirigió hacia mis hermanos y les pregunto quienes asintieron.

Sissy busco en un cajón algo antiguo un vestido rosa pastel de la época victoriana y me lo entregó junto a unas zapatillas blancas y un collar de perlas. Me cambié en el baño y salí para seguirles el juego. En un momento yo y Justin quedamos cerca y decidí aprovechar esa oportunidad para preguntarle algo.

De donde ha salido este lugar?- le susurre al oído y este me sonrió mientras abatía una espada de plástico.

Lo alquilé al dueño y Patrick se ocupó de la decoración mientras dormias- susurro cerca de mi oído lo que me produjo unas sensaciones y cosquilleos extraños en mi.

Porque lo hiciste?- le pregunté esta vez atrapando a la pequeña Sissy en una cuerda color rosa.

Tus hermanos querían jugar a los piratas y considere adecuado este lugar- respondió sin mirarme ya que se concentraba en el juego en que estábamos.

Ya veo! Te lo agradezco mucho!- le susurré y me separé de su lado dándole un leve golpe (mentí en lo de leve) en las rodillas tumbándolo al piso.

Porque hicistes eso?! Ya sabía que eras salvaje pero es un juego!- exclamó fingiendo estar adolorido y mis hermanos se echaron a reir.

Nunca te confíes, recuerda que seguimos en guerra! Además está es mi venganza por lo ocurrido en casa de mi madre!- le grite muerta de la risa por su cara. Tenía una expresion como aquella que hacen los niños que prueban algo demasiado de agrio.

Con que en esas estamos eh? Bien que comienze la guerra. Sissy tu seras mi aliada- tomo la diminuta mano de mi hermana y se dirigió a su lado a esconderse.

Bien pues Ethan será el mio!- le grite escondiéndome detrás de un barco mediano mientras ideaba un plan.

El juego es así, cada líder tiene que tener un aliado. Ese aliado es el que te ayudará a proteger tu espalda en la guerra. La guerra consiste en chocar las espadas de plástico cerca de la borda y no dejar que te hieran o que caigas al mar infestado de tiburones (véase la piscina y los tiburones inflables) fácil no? Pues se equivocan no es fácil y menos si tienes un traje como el mio y a un rival como el fastidioso de Justin.

El juego de por si era divertido y los niños estaban felices. Justin se empeñaba en hacerme perder pero no podía porque yo no lo dejaría vencerme tan fácil. Realmente este Justin amable, Bueno, Atento y Divertido me gustaba. Sin mencionar esa sonrisa coqueta que tiene que le sacaría mil suspiros a cualquiera, ahora entiendo porque decían que era todo un Adonis. En uno de esos momentos típicos donde pierdes la concentración por ligarte a tu rival yo no fui la excepción. Tropecé con mi propio traje y estuve a punto de caer y darme contra la escaleras hasta que Justin me ayudo cayendo él en la piscina. Cuando salió del agua y vi pequeñas gotas de agua deslizándose por su perfecto rostro y su desordenado cabello negro mojado sentí un revoloteo en el pecho.

Te estás enamorando idiota!- me gritó mi subconsciente.

Estas loca eso no es verdad!- me respondí eufórica al escucharlo.

Entonces que crees que sea si no es amor?- me pregunto mi subconsciente y no tenía nada que decir ya que al parecer no me equivocaba.

Quieres una toalla? O mejor sales y me Felicitas por ganarte?- le dije con tono burlón alardeando de mi victoria.

Deberías ayudarme mocosa! Fui yo el que te salvo- dijo esta vez volviendo a ser el Justin arrogante que conocía.

Vale,Vale! ven dame la mano para ayudarte- le ofrecí mi mano y este me miró pero lo hizo de una forma traviesa que no me gustó. De pronto me halo y ya me encontraba en el agua helada.

Maldito Justin! Esta fría! Como te atreves!- le grite chapoteando agua mientras este se tapaba la cara.

Ya estamos a mano no? Que tal si hacemos un acuerdo de paz?- me pregunto ayudándome a salir del agua.

Cual? Espero que también me beneficie- me sonrió y asintió de manera tierna.

Que tal si en vez de estar peleando siempre, no intentamos llevarnos bien- tomo dos toallas y me tiro una con una muda nueva de ropa de mi talla y le agradecí.

Estas sugiriendo que ni yo te molestó ni tu a mi?- pregunté tomando la ropa y dirigiéndome al baño al escuchar la explicación de Justin la cual termine aceptando.

Terminamos de cambiarnos y Justin nos llevó a comer para luego seguir el camino a casa de mi madre a dejarnos. Ethan se había quedado dormido y yo me mantenía despierta abrazando a Sissy mientras dormía en mis brazos. Llegamos a la casa y Justin se ofreció a ayudarme a llevar a mis hermanos a acostar, luego se despidió de mí madre y me abrió la puerta de su auto para llevarme a casa de Paige. Le agradecí y cuando me iba a ir de maldad Justin me dio un beso en la frente que hizo que me sonrojara y corriera hacia el cuarto de Paige. Una vez allí me acosté e intente dormir ya que sabía que el día de mañana iba a ser muy largo.