Capítulo 4: Muerte

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Llevas mucho tiempo siendo torturado por ellos. Tu mente esta totalmente destruida, ya no sientes dolor de ningún tipo. Ya falleciste pero aún respiras. Eso es todo, tu dejaste de existir. Ellos notaron eso y dejaron de torturarte. Solo te dejaron encerrado en aquella habitación. Sin comida ni agua, aunque este lugar no te permitía morir, viviste con hambre y sed durante mucho tiempo. Como no tenías manera de conocer el tiempo, no sabes cuanto tiempo estuviste encerrado. Comenzaste con tu sangre a crear un calendario. Todos los dias con un poco de sangre hacias una pequeña raya, a la semana una un poco más larga y al mes la mas larga de todas. Asi lo hiciste 12 meses, cuando llegaste al año, empezaste a hablar solo, a escuchar voces y a imaginar cosas que no pasaban. Tuviste interminables conversaciones contigo mismo. Fuiste golpeado e insultado por tus voces. En los primeros meses del décimo año vinieron a visitarte estos hombres, estaban muchisimos más envejecidos. Trajeron agua y comidas varias. Aunque morias de hambre, no tocaste ni una sola gota de agua o un pedazo de comida. Por mas que trataron de alentarte a comer no accediste.

-Ya no queremos torturarte más. Descargamos toda nuestra rabia y nos sentimos mucho mejor, esto es normal en nuestra sociedad.

No podías creer que te estuvieran diciendo esto. ¿Normal? Pero decidiste aprovechar tu primera oportunidad en años.

-Esta bien. No quiero comida.
-¿Que necesitas? Pidelo y veremos si podemos dartelo, pero no podemos darte la libertad.
-Era ovbio. Quiero libros. Quiero que me enseñen sobre ustedes. Su cultura, su historia. Eso quiero- y tomas un pedazo de pan, para convencerlos de tu buena voluntad-Solo eso quiero, algo que hacer.
-Esta bien, te enseñaremos. Damos unos días para buscar los libros que nesecitamos.
Dejan la bandeja y se retiran. Algunos guardias te traen comida todos los días. Tres días despues vuelven estos hombres.
-Aqui te trajimos los libros elementales sobre física, matematica, química, biologia y otras ciencias de nuestro mundo.
Te enseñaremos con la condición de que nos perdones.
Nuestros nombres son Saecûlum y Epûlae. Pertenecemos a la academia de ciencias de nuestro mundo. Nosotros llamamos a nuestro mundo Azerimünya. Vivimos en este mundo desde hace millones de años cultivando el conocimiento y la inteligencia. Hasta que fuimos azotados por la guerra. Este hecho dio lugar a las leyes actuales por las cuales fuiste castigado. Hace unos miles de años vimos su planeta distante y los observamos desde entonces. Conocemos toda su historia y aprendimos por diversión su lenguaje.

Desde ese día, Saecûlum y Epûlae te enseñaron muchisimas cosas. Aprendiste sobre la Historia de este mundo, la anatomía y el ciclo de vida de los habitantes. Las matematicas y la física de este mundo estan milenios adelantadas a las de la Tierra, las cuales aprendiste con gusto. Te educaron en la otra dimensión durante mas de 20 años sobre todo lo que deseaste aprender. Con tus conocimientos actuales podrias ser el hombre mas inteligente de la Tierra (Algo que cuadraba en tu futuro) pero tu rencor no había muerto. Dejaste de llamarte Marcos y te empezaste a llamar a ti mismo Praegressus.

Siempre que podías pedir libros de algo que deseabas saber, ellos lo conseguían. Saecûlum era muy dotado en conocimientos de todo tipo pero disfrutabas más hablar con Epûlae. Despues de un tiempo Epûlae en una de sus debates sobre filosofía te dijo:

-Yo se que deseas salir de aqui. Creo que entendiste tu lección mereces vivir entre nosotros como uno más
-Si lo deseo con fervor pero sus leyes no me lo permiten
-¿Y si ovbiamos las leyes?
-Como lo harías. Todo el mundo me conoce y me odia allí afuera
-Eso fue hace cientos de años. Recuerda que el tiempo aqui no pasa. Se mantiene estático, lo que significa que no puedes envejecer. Eso no significa que en nuestro mundo y el tuyo pase lo mismo. Mientras estes en esta dimensión no moriras de vejez.
-Pero ¿Ya nadie se acuerda de mi? Eso es perfecto pero alguien que me reconozca y se acabaría todo. No solo volvería aqui, ustedes también sufrirían las consecuencias.
-No te preocupes de ello. Te traeremos vestidos de nuestro mundo y dejaremos tu barba crecer. También dejarás de llamarte Marcos. Pensaremos en un nombre.
-Praegressus. Me llamare Praegressus. Ese será mi nombre
-¿Praegressus? Esta bien te lo permitiremos. Ahora que lo pienso es perfecto para ti.

La Foto Imposible Y Sus Consecuencias (Pausada Y En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora