La frialdad de mis palabras son por causa del dolor.
No sabes lo feo que se siente que vengas a decirme "amor".
Fuiste vos el que acabó con esto, el que rompió con lo nuestro.
Es triste que me veas de esa forma. Te cuento, parezco pero no soy tan crédula. No creeré de nuevo en tus patéticos lamentos.
Me dejaste marchar y ahora me vienes a buscar. Tu perfidia me lastimó, aquejada me dejó.
No te amo, yo te quiero, o tal vez ya ni eso.
No te puedo borrar de mi mente pero mi corazón por tí ya nada siente.
-Agustina Martínez
