25 de julio de 2002.
Nina y su mejor amigo jugaban en la piscina aquel día soleado de verano.
En un momento cualquiera, él se acercó y depositó un tierno beso en su mejilla derecha. Cuando ella lo miró a la cara, el pequeño niño de seis años tenia los cachetes teñidos de un fuerte color carmesí y los ojos marrones brillando tímidos.
Fue un momento tierno. Nina nunca lo olvidará...
Como nunca lo olvidará a él.
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Nina
Short StoryElla lo amaba, él la quería. Como amiga. Tal vez se enfadó un poco con él por eso, también consigo misma, pero nunca dejó de amarlo. Nunca su amor por él se debilitó. Ni cuando él se fue, Nina dejó de amarlo. Ni cuando él dejó de existir, su amor fu...