Arigatou

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Pov Sakura
Había ido a la mansión de los Uchihas para recoger algunas cosas que se me habían quedado desde el incidente. No crei necesario avisarle a Sasuke de mi visita ya que sólo sería un momento. De todas maneras, debía regresar al hospital. Tenía que llenar algunos informes incompletos...

Pensé que mi compañero de equipo se fastidiaría con mi sorpresiva presencia, pero el vacío en sus ojos cuando me dejó pasar me dejó sin palabras. Lo seguí hasta donde él ya había reunido todo lo que no le pertenecía y tome mis cosas, envueltas en una simple tela azul oscuro. Las revise, sólo por cerciorarme.
- Falta algo... Sasuke, ¿puedes...?
Voltee para atrapar su mirada oscura. Generalmente no solía dejar entrever nada a través de sus ojos, pero esta vez pude distinguir tristeza y una profunda soledad. Aunque su mirada permaneció impasible, me le acerque, todavía con mis cosas en las manos.
- ¿Ocurre algo?
Se demoró en enfocar su vista en mi. Cuando lo hizo, me pareció que su máscara caia. Pensé en el día de hoy. Rebusque en mi memoria algún hecho terrible que lo marcara y que tuviera relación con Sasuke...podían ser muchas cosas...pero sólo una salto en ni mente.
- ¿Ya fuiste a visitarlos? - le pregunté con suavidad. No pareció sorprendido con mi pregunta.
- Si
Hoy era el día en el que todo el clan Uchiha había desaparecido, dejando únicamente a Sasuke como sobreviviente actual.
- Sabes que Naruto y yo estamos para ti cuando quieras.
- Hmp...a veces me recuerdas mucho a ella...
- ¿Ella...?
- Mi madre. Ella era también amable y se preocupaba por mi e Itachi. Mi padre era muy estricto. Aún no entiendo como una mujer como ella se enamoró de un hombre como el.
- ¿Los extrañas?
- A veces. Ya me acostumbré a estar solo.

Deslice mi mano en la de el sin poder resistirme. Esperaba su rechazo, pero lentamente fue cerrando sus dedos alrededor de mi piel. Le sonrei levemente, resignada ante la dureza de la vida. De su vida. Y a su soledad. No se si alguna vez podré perpetrar ese corazón oculto tras muchas barreras formadas por los años y el dolor de la pérdida. Al menos podía estar aquí y ahora, sosteniendo su mano y apoyándolo en su sufrimiento.
- No tienes porqué estar solo más tiempo.
- Ya se. No es fácil.
- Las mejores cosas no lo son ¿no crees?
El sonrió.
- Gracias, Sakura.
Con su otra mano me picó la frente y antes de que pudiera quejarme, había descendido sus dedos hasta debajo de mi barbilla, levantándome el rostro, y presionado sus labios suavemente sobre los míos. Solté un pequeño jadeo de sorpresa antes de imitarlo y cerrar mis ojos, dejando que él tomara el control. Nos mantuvimos cerca aún cuando nos hubimos separado para recuperar aire. Demore en abrir mis párpados nuevamente. Cuando lo hice, Sasuke había apoyado la cabeza en mi hombro, su espalda formando un arco desde que él era mucho más alto que yo. Nuestras manos todavía estaban entrelazadas.
- Lo siento
- ¿Por?
- Por todo lo que una vez te hice. No creo merecer esto, después de todo. - hizo ademán de separarse, pero lo detuve con una mano sobre la parte baja de su cuello, presionándolo ligeramente hacia mi.
- Tal vez no te lo merezcas...pero ya haz hecho todo para redimirte. Además, no hay manera en la que yo te pueda odiar...

Sentí el agarre que tenía sobre uno de mis brazos intensificarse mientras la tela que me cubría el hombro opuesto se humedecía de a pocos. Subí mi mano libre hasta entrelazar los dedos entre sus cabellos, apoyando mi mejilla en su cabeza, y apreté un poco su mano aún en la mía.
- Arigatou Sakura....hountou arigatou...

Pov Hinata
Ya llevábamos un rato sentados en la mesa, esperando pacientemente a que un rubio apareciera. Mi padre, sentado a la cabeza, mantenía su ceño tercamente fruncido mientras que los minutos pasaban. Mi hermana a mi lado parecía aburrida. Nunca fue muy paciente de todas formas. Estaba a punto de sugerir algo cuando la puerta corrediza se abrió lentamente dejando ver a uno de los sirvientes, presentando con voz pausada a Naruto. El  entró en la estancia con una mano en su nuca. Me siento contenta de conocerlo lo suficientemente bien como para saber que ese gesto lo hacia cuando estaba nervioso. Igualmente, no tendría por qué no estarlo. Le sonrei sin disimulo para tranquilizarlo un poco y observé como tomaba asiento frente mío. Mi padre, en el otro extremo de la mesa, se removió casi imperceptiblemente. Sabía que odiaba la impuntualidad...
- Así que, Uzumaki Naruto, tu eres uno de los compañeros con los que Hinata fue a esa misión, de la cual regresó en mal estado hace poco...
- Si-ttebayo...la misión no salió de acuerdo al plan...
- Uhum...- en ese momento entró alguien y sirvió el te, interrumpiendo momentáneamente la conversacion. Cuando todo estuvo dispuesto, mi padre continuo- yo me cuestiono lo siguiente...si tu, Uzumaki Naruto, ganaste el título de heroe durante la guerra, ¿como es posible que no pudieras hacer algo para evitar el estado crítico en el que se encontraba mi hija al regresar a Konoha?
Observe como el rubio que adoraba palidecía. Mi padre había sido horrorosamente directo e injusto.
- Otou-san, y-yo ya te conté lo ocurrido. Naruto-kun no habría podido hacer nada p-por mi o por mis amigas desde que todos nos separamos. Nosotras fuimos d-descuidadas. Naruto-kun no tiene la culpa de nada...
- No, Hinata-chan, tu padre tiene razón. Formábamos un equipo, debí haber estado allí para protegerte.
- Nadie podría haber previsto jamás lo que el enemigo tenía predispuesto. No es justo que te culpes por algo que no sabías que podía pasar.
- No lo excuses, Hinata, él esta admitiendo su responsabilidad.
- No padre. Las cosas no son de esa manera.
- Hina-chan...
- Tu tampoco estas en lo correcto, Naruto-kun. - los mire por turnos fijamente, mi expresión severa- soy una kunoichi de nivel jounin. Se protegerme y se lo que en una misión puede pasar. No pueden esperar de mi debilidad y cobardía ante el enemigo. Soy capaz de protegerme y en el caso de fallar, atenuarme a las consecuencias. Si, la misión salió mal, nos dejó en coma a mi y a mis amigas. Son los riesgos de ser ninja. Y eso es lo que cada persona en esta habitación es. Siento que subestimarme de la forma en que lo hacen dos personas preciadas para mi es una ofensa.

No estoy segura de donde salió eso exactamente, pero sentí mi pulso acelerarse. Mi discurso había sido impulsado por mi grave desacuerdo con las actitudes de ambos hombres presentes. La adrenalina del momento se había esfumado para ahora dejarme casi sin poder respirar de los nervios...no sabía cómo podían reaccionar. De por si mi hermana se veía sorprendida...que decir de mi padre y Naruto-kun. Claro que mi progenitor sabía disimularlo muy bien...

Después de carraspear un poco, fue mi padre el que se retomo la conversación.
- Bueno, eh escuchado que quieres ser Hokage, ¿no es así?
- S-si...¡es mi suelo de toda la vida-ttebayo!
Suspire. Y esas fueron unas disculpas indirectas por parte se mi padre. Naruto-kun sólo le sigue la corriente...
- Eh, Hina...- me susurro Hanabi a mi lado.
- ¿Mm?
Cuando vio que contaba con mi atención, subió positivamente sus pulgares hacia arriba en mi dirección. Le sonreí y regrese mi vista a la conversación "amistosa" y algo nerviosa que mantenían ahora los hombres de la mesa. 

30 min despues

Mi padre se había retirado ya, seguido de mi hermana la cual no dejó de lanzarme miradas picaras hasta que se perdió entre los pasillos de la casa. Naruto-kun y yo decidimos salir al patio a tomar aire. 

Ya fuera, nos sentamos al borde del pasillo, con la luna coronando la noche ante nuestros ojos. Decidí empezar yo, ya que al parecer mis niveles de adrenalina y seguridad propia habían aumentado ultimamente.

- Disculpa a mi padre, Naruto-kun. Es muy serio y estricto, pero se preocupa por nosotras. 

- Sin cuidado, Hina. Es comprensible la actitud de tu padre. De hecho, lo entiendo muy bien.

- ¿El qué?

- El no querer perder algo preciado... Hina-chan, se que demoré demasiado en darme cuenta cómo me sentía respecto a ti y te hice daño al tenerte esperando tanto tiempo...tuvo que pasar el incidente de la Luna para que finalmente pudiera abrir los ojos. Siendo sincero, te iba a dar esto ni bien regresáramos de la misión, pero dados los resultados...supongo que fue mi turno de esperarte. 

Lo miré confundida. El sonrió y sacó algo de su bolsillo. Cogió una de mis manos e insertó el pequeño anillo en mi dedo anular, dejándome todavía más confundida y las mejillas hirviendo al darme cuenta de lo que esto significaba.

- N-na-naruto-kun...

- Ahora estamos oficialmente comprometidos...- levantó su mano izquierda, mostrando un anillo parecido al mío en uno de sus dedos. Ahora se veía muy nervioso- l-lo tengo en esta mano porque en la derecha las vendas no dejarían que se notara... ¿te gusta? si es demasiado pronto, podemos...

Lo interrumpí besándolo cortamente en los labios. Sentía las lagrimas picándome los ojos. 

- Es...yo...¡arigatou, Naruto! - le dije al separarnos para despues abrazarlo con todas mis ganas. Él me correspondió, hundiendo su rostro en mi cabello. 

- Gracias a ti, Hina. Eres lo mejor que me pudo haber pasado...

- ¡Eh, hermana! ¿Para cuándo es la boda? 

Nos separamos rápidamente como si tocarnos quemara. Levanté la cabeza y observé a Hanabi, que tenía la cabeza fuera de la habitación diagonal a donde estábamos. Conociéndola, seguro había estado escuchando nuestra conversación...¡Que vergüenza!

- ¿Hanabi? ¿De la boda de qué hermana hablas? - sonó la voz de mi padre, estruendosa por toda la casa. 

- ¡De mi hermana y Naruto-san! ¡Se acaban de comprometer!

- ¡¿Cómo?!

Aquí vamos otra vez....



Vaaaaaale x3 si leyeron mi mns d la semana pasada, sabrán el motivo de mi demora ^^ igual, la primera parte me quedo corta, pero me parece q dice bastante de la evolucion de la relacion entre saku y sasuke. La segunda parte pss...el final habla por si solo. A partir de este momento, falta ya uno o maximo dos capitulos para terminar la historia :33 sin contar los dos especiales zukistrukis que me faltan. Pss bueno, eso es todo me parece. Gracias por leer, lamento si quedo algo corto el capi pero pss bueno, se les agradece muchisimo su paciencia y ...nos leemos pronto!!!

Iloveanimes25

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