Capitulo 11

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Aidan

-¿Y qué quieres que diga? Si al final vas a hacer lo que te de la gana.- sabía que me estaba comportando como un verdadero imbecil y lo note cuando vi que en sus ojos se formaban lágrimas y de verdad ¿qué digo?.- ¡Has lo que quieras Ángela! Pasa por el y llévalo a recoger a Mía, ese asunto no es mío.- tenía tanto coraje,confiaba en ella de verdad lo hacía pero él se iba metiendo tan rápido en mi familia,sabía que iba a pasar pero no tan rápido y no hasta este grado.

-¡Te lo estoy diciendo por qué quiero que veas que te cuento todo y no lo hago a tus espaldas!.-me dice alzando la voz.

-¡¿Pues sabes que?! De hoy en adelante,no quiero que me cuentes nada de él, ni de lo que vallan hacer es tu problema.- le digo, sé que ahora sí soy el imbecil más grande de todo el mundo.

-¡Sabes Aidan ahora sí te estás comportando como un reverendo cabrón y si eso es lo que quieres pues desde este momento lo tendrás!.- agarra las llaves del comedor y sale azotando la puerta.

Tengo tanto coraje que no me puedo quedar quieto camino de un lado a otro y me duele mucho la cabeza siento que me va a estallar, se que también esto sea consecuencia de lo que me dijo el doctor pero no quiero pensar que sea eso, todavía no es momento de decírselo a Ángela y menos ahorita que tenemos problemas.

Lo mejor será que salga a caminar un rato, así me distraigo y se me quitara, agarro mi chamarra negra y mis llaves, antes de empezar a caminar sin algún rumbo prendo un cigarro, hace mucho que no fumaba y de verdad se lo agradesco a mis chicas pero en este momento lo necesitaba. Después de dar vueltas y solo ver hacia el piso llego a sentarme en una banca que está enfrente del pequeño súper a donde niño el asqueroso de mi padrastro me mandaba a comprar alcohol. Tenía sólo seis años cuando murió mi padre...tenía cancer al principio no entendía esa palabra hasta que la vi en el esa enfermedad lo desgastaba día a día.
Murió dejándome el peor de los vacíos, pero mi madre no tardó demasiado en volverse a casar decía que se sentía sola y que él sería un padre para mí,como todo niño se lo creí, pero cuando el muy infame llego a casa lo primero que hizo fue poner sus reglas a mi madre cada noche la golpeaba y yo era su sirviente,después de la escuela me mandaba por alcohol si llegaba a demorarme por qué me quedaba platicando con amigos me daba unas golpizas que a veces no podía quedarme en pie,mi madre solo veía por miedo no decía nada y eso era mi coraje,ella estaba para defenderme pero ¿por qué no lo hacía?. Cuando cumplí trece años me salí de la casa ya no aguantaba más, me quedaba con un amigo que vivía con su hermano sus padres habían muerto en un accidente, él era más grande que nosotros así que nos consiguió trabajo en un bar éramos meseros pero nos dimos cuenta que eso nada más era la pura pinta de bar, ahí se vendía droga y si le entrabas y sabias administrarla te iba bien, claro a mí me fue muy bien diría yo, no consumía mi mercancía o si lo hacía trataba de no acabarme todo y quedar con la deuda, vendía y era a grandes cantidades hasta que el dueño vio que era bueno y me dejo a cargo.
Después conocí a Aline,llegó una noche al bar me llamó la atención así que me acerqué a ella, me contó sus problemas le ofrecí para que se relajara desde ese día no paraba de ir a buscarme y consumir y yo tampoco desde ese día pare,creí que la empezaba a querer pero creo ahora me doy cuenta que no era así solo buscaba compañía y ella me la daba pero ella estaba tan enamorada de Antón,por eso el día que nos encontró me dio tanto gusto sentía que valía la pena que me golpeara y ¿que por qué? Por qué al fin Aline iba a estar conmigo más tiempo. Pero llegó el día que aborto, siempre estábamos drogados nunca se dio cuenta pero al fin de cuentas no era mío era de él y si era de él cuando nos encontró era la primera vez que me había metido con ella pasaron dos semanas cuando aborto,así que me enoje tanto que la corrí si lo hubiera tenido yo otra vez quedaría solo ella lo hubiera ido a buscar como cada noche lo intentaba pero yo no sé lo permitía, la mantenía encerrada en el departamento donde vivíamos hasta que yo llegaba ya noche,reclamaba pero nunca le podía expresar lo que sentía, sé que de todos modos me volví a quedar solo pero la corrí por qué tenía tanto coraje al saber que ese hijo era de él y no mío que el podía tener una familia y yo no. Antón y yo teníamos la vida igual de jodida pero teníamos una persona que nos hacía sentir que no todo estaba perdido y esa era Ángela y no la iba a perder tenía con ella lo que siempre había querido,luché muy duro para que ella quisiera estar conmigo, así que de verdad no iba a dejar que él me las quitará.

-¡Aidan!.- le doy la ultima fumada a mi tercer cigarro y volteo a ver quién me habla.

-¿Qué pasó "Gran Vic"?.- me paro para saludarlo, el gran Vic lo conocí en el bar donde trabajamos el era el encargado de la puerta,era de seguridad o mejor dicho encargado que nadie me matará,le mande un mensaje para que nos reuniéramos aquí.-¿Me tienes información?

-¡Si tengo algo que decirte! Pero mejor vamos al bar.-niego con la cabeza no me gustaría volverme a parar por ahí.

-¡No tú sabes que no! Hace mucho que no voy para allá.- le digo y enciendo otro cigarro.

-¡Deberías de ir todos te extrañamos Aidan solo será un rato, platicamos y nos tomamos algo será muy tranquilo!.- me dice y me lo pienso.

-¡Bueno vamos un rato a que me cuentes que está pasando! Pero oye ahora Ángela está con él en el parque...

-Si lo se pero deje a alguien más vigilando.-me dice mientras empezamos a caminar.

¿Y si nunca dejaste de amarme?#GAwards Donde viven las historias. Descúbrelo ahora