Capitulo 24

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Esteban la observó.

Esteban: no, la verdad no quiero detenerme!

Andrea: entonces ven aquí!

Esteban no se contuvo y entró en ella de nuevo, Andrea seguía encima de la lavadora, Esteban la levanto y empezó a caminar con ella, pasaron por la cocina y sobre un muro la acostó, Andrea elevó y abrió las piernas, mientras esteban logró acomodarse para moverse dentro de ella, el momento era extremo, la pasión que los rodeaba esta cargada de todo, besos ,caricias una entrega total y apasionada de parte de ambos, llegando a un climax completo, no podían faltar los gemidos ante tanto placer que experimentaban, estaban solos en el departamento y eso les permitió gozar al 100% cada uno de sus rincones, de pronto unos minutos después yacían ambos abrazados sobre uno de los sofás de la sala, una de las piernas de Andrea atravesaban las dos piernas de Esteban, sus respiraciones estaban algo agitadas.

El celular de Esteban sonó, y como pudo se levantó y empezó buscarlo, sus ropas estaban en el suelo, pero haciendo un camino por el trayecto que habían tenido minutos antes.

Cuando Esteban agarró su teléfono, volvió al sofá con Andrea, ella se acomodó como estaba antes y puso la cabeza en su pecho.

Esteban: bueno! Tía, vi dos llamadas tuyas, pasa algo?

María: no hijo, todo bien?

Esteban: si tía, por qué?

Maria: bueno es que te escucho algo agitado.

Esteban: ahhh eso, no es que tenía el teléfono lejos de mi alcance y corrí para tomar la llamada.

Maria: entiendo.

Esteban: y para que me llamabas?

Maria: para saber si vienes a cenar, es que Samuel, los niños y yo saldremos fuera.

Esteban: no tía, llegaré más tarde, de hecho ya cené, así que ustedes tranquilos, salgan sin mi, en un rato estaré de regreso.

Maria: perfecto hijo, hasta más tarde.

Esteban: adiós.

Andrea: ya cenaste?no me digas.

Esteban: bueno, primero me comí el postre, mmm y que postre.

Andrea: jajaja ahora si, vamos a vestirnos y a preparar algo de cenar, tanto ejercicio me dio hambre.

Esteban: a mi también, fue fantástico, de haberme detenido me hubiera arrepentido.

Andrea: lo sé, por eso mismo te dije que no era oportuno detenernos.

Eduardo: hijo, ya está la cena, son unos hot dog que te van a encantar.

Eduardito: gracias.

Eduardito se sentó en el comedor con su papá y con Ximena, estaba algo aburrido.

Ximena: vamos a ver la peli, me dijeron que es buenísima.

Eduardito: bueno.

Eduardo: Eduardito hijo quita esa carita.

Eduardito: no me digas Eduardito!!

Eduardo: pero porque? Así te llamas.

Eduardito: no, me llamo Lalito.

Eduardo: Lalito?

Eduardito: a los Eduardos se les dice Lalo, pero como soy pequeño soy Lalito.

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