Ella se aterrorizó en el momento en el que no supo distinguir si su sonrisa era verdadera o falsa.
Porque ahí su peor miedo estaba saliendo a luz, riéndose en su cara y mofándose suya. Sería eufemismo decir que no trató de convencerse de que fue solo su idea, pero no pudo evitar la realidad en su interior...
Y ahí estaba, tratando de lidiar con el hecho de que ya se estaba confundiendo consigo misma; Y no era muy difícil adivinar, ella temía no reconocer a la persona en quien se había convertido.
ESTÁS LEYENDO
Depressive notebook
De TodoLas palabras que no pueden ser dichas se quedan atascadas muy dentro... Y para no ahogarnos con ellas debemos dejarlas salir... A veces salen en lágrimas, a veces en suspiros, otras se reflejan en lo profundo de una mirada y algunas en la piel de...
