« Tres Dias » ❴h.s❵

⚜A dos días del final⚜

Holmes Chapel , 30 de Enero de 2016

Ráfagas de viento cálido golpeaban su cara.

El cielo, que comenzaba a oscurecerse, estaba adornado en su totalidad por unas inmensas nubes grises; en cualquier momento la lluvia se dejaría caer en este lugar.
Las calles de Holmes Chapel estaban algo desiertas pero eso no infundia temor; el pueblo se caracterizaba por su tranquilidad, donde la mayoría de sus habitantes se conocían entre si, dándole un aire bastante acogedor.

Caminaba para reunirse con sus amigos de infancia. Todos los viernes el playstation, la comida y el alcohol no podían faltar. La sensacion de que alguien lo seguía causó tensión en su cuerpo y de inmediato volteó su cabeza para saber quien venia tras él. Sus músculos se relajaron cuando se encontró a Clara en la calle que colindaba con la casa de Niall. Aun así era algo extraño que ella estuviera en este sector.

— Hola ¿A dónde vas?.

Ella se caracterizaba por preguntar todo lo que Harry hacía. A veces era raro el interés que solía demostrar hacia él pero se lo atribuía al hecho que eran amigos.

— Me reuniré con los chicos y voy algo atrasado.— hizo una mueca — Si quieres hablamos otro día. — sonrió tratando de que sus palabras fueran tomadas de mejor manera.

— Oh, ya veo.— masculló — Que te diviertas.— elevó sus comisuras levemente, casi forzándolas haciendo que su sonrisa se notara algo falsa.

Harry evitó tomarle importancia y se despidió. Apuró la velocidad de sus pasos hasta llegar al lugar.

La noche trascurrió velozmente entre risas, anécdotas, confesiones y otras cosas. No podía negar que sus amigos eran la mejor compañía que él pudiese pedir.

El tema «mujeres» no tardó en salir y se sintió incómodo cuando mencionaron a Clara. Según ellos, la chica tenía una leve obsesión con Harry. En cambio él creía que eran afirmaciones sin sentido. Nunca había notado indicios que le dieran a entender esa supuesta obsesión. Clara era una chica algo extraña pero su comportamiento no era para tildarlo como el de una persona obsesiva ni mucho menos.

— ¿Podriamos dejar de hablar de ella por favor?.

El tono de Harry era con algo de molestia tras las consecutivas burlas de sus amigos. Les causaba gracia que Clara prácticamente apareciera en cada lugar que él asistía, como si estuviera siguiéndolo todo el tiempo.

—Tranquilo Harold, son sólo bromas.— Niall palmoteó el hombro de su amigo.

—Bien chicos, es hora de irme.— habló Derek, captando la atención de todos.

— ¿No piensas quedarte? Habíamos quedado de acuerdo en eso.— dijo Harry mientras abría una lata de cerveza.

—Esa era mi idea pero me llegó un mensaje de mi padre y quiere que lo acompañe. Lo siento.— se disculpó.

— No te preocupes y maneja con cuidado. La lluvia tiende a poner las calles aun mas peligrosas — habló Niall con preocupación.

— Lo sé. — asintió Derek.— Bueno adiós. — caminó hacia la puerta para luego salir del apartamento donde se ubicaban.

Se podía oír la lluvia torrencial en el exterior. Harry fue hacia el ventanal para observar lo que acontecía. Definitivamente se trataba de una tormenta debido al imponente viento que mecía el tendido eléctrico además de los destellos de luz en el cielo y los estruendos que se hacían notar.

— Puta lluvia — murmuró apoyando su frente en el vidrio.

Decidieron ocupar algo de tiempo en seguir jugando playstation. Ambos estaban absortos mirando sin cesar el televisor cuando el sonido del celular de Harry hizo que se sobresaltasen.

— ¡Mierda! —  exclamó Niall. —¿Acaso estas son horas para que alguien llame? ¿Qué demonios ocurre con esta gente? — seguía refunfuñando mientras Harry cogía su celular para contestar.

— ¿Aló?— se quedó en silencio un momento con expectación — Sí, es mi amigo — miró a Niall con extrañeza. — ¡¿Qué?!.

Sus ojos se abrieron con notoriedad. La mano que sostenía el celular comenzó a temblar ligeramente. Lágrimas amenazaban con salir de sus ojos.

— ¿Todo bien?— Niall se acercó al notar el repentino cambio en el semblante de su amigo.

— Sí, no se preocupe — ignoró aquella pregunta y siguió hablando por teléfono. La voz de Harry se escuchaba afectada — yo me encargaré de avisarles. Adiós.— a penas cortó la llamada  lanzó un fuerte grito — ¡Mierda, mierda y mas mierda! — Harry golpeaba el costado de los sillones con sus pies.

—¿Qué carajo te ocurre? Pareces demente. — protestó el chico rubio dándole un leve empujón.— Me rompes un sillón y tendrás que comprarme otro.

Harry hizo caso omiso a las palabras de su amigo y continuaba golpeando el objeto.
Daba pequeños gritos de angustia mientras su amigo trataba de calmarlo.

— ¡Basta Harry! ¡Tranquilízate y dime que está pasando de una jodida vez!— zamarreó al chico de cabello rizado para hacerlo entrar en razón.

La rabia repentina de Harry se fue calmando paulatinamente. Su pecho iba en ascenso y descenso con brusquedad. Miró a su amigo tratando de encontrar las palabras adecuadas para contarle lo que acababa de saber. Tomó una gran bocanada de aire antes de hablar.

— A Derek le dispararon.

La reacción de Niall no tardó en aparecer.

— Debe ser una jodida broma - sonreía con nerviosismo — Si piensas que voy a creerte es...

— ¡Está muerto! ¿Te piensas que voy a jugar con eso? — Harry espetó antes que el rubio terminara de hilar la oración — ¡Está muerto maldita sea, está muerto!

Niall se desplomó en su sillón con la mirada pérdida en algún lugar de su apartamento; no pronunció palabra alguna.

Harry caminaba de un lado a otro.

— Jodida mierda todo, jodida mierda todo — repetía en voz baja aún intentando asimilar lo sucedido. Un mensaje en su celular llamó toda su atención.

Dos días para el final.

Esas simples palabras provocaron que una fría corriente atravesara su interior y más cuando el número de dicho mensaje era oculto.