Me Enamore De Mi Secuestrador.

Capítulo 1

Un día por la mañana cuando iba de camino a la escuela senti que una persona me agarró y me puso un pañuelo en la nariz con algo para dormirme, yo gritaba no por favor déjeme ir, pero esa persona no le importó mi dolor y me desmayé.

Cuando abrí los ojos tenia un dolor de cabeza terrible, las manos y los pies atados, estaba en una hermosa casa y estaba muy muy asustada por lo que me había sucedido.

Auxilio! Auxilio! Auxilio!

Cuando de repente escuché unos pasos que se acercaban cada vez más y más y yo estaba aterrorizada, porque no sabia como rayos llegué a esa casa y mucho menos quién rayos me había secuestrado.

Cuando de repente esa persona abrió la puerta y al fin pude ver quién era mi secuestrador, es tan bello tiene los ojos azules, es joven, alto, blanco, tiene el pelo rubio y largo como por los hombros y se ve bien guapo.

Estaba vestido de negro de los pies a la cabeza.

Estaba muy nerviosa, asustada y ese hombre solo me miraba, y muy serio por cierto.

Lo primero que le dije llena de rabia fue.

¿Quién eres? ¿Y qué rayos quieres conmigo? ¿Y por qué me traiste aqui?

Secuestrador: Tú no estás supuesta a hacer preguntas, las preguntas aquí las hago yo, eso que te quede claro. ¿Cómo te llamas? ¿Y cuántos años tienes?

Yo estaba muy enojada con él, así que me quedé callada.

Secuestrador: Hablaaaa si no quieres que te valla peor.

Yo muy nerviosa le contesté mee llamooo Jenny, y teengo 15 años.

Secuestrador: Okay ahora si nos estamos entendiendo.

Y luego él llamó a sus hombres, y les dijo.

Secuestrador: Llevensela y preparen todo que la entrega será en Venezuela.

No me toquen, no me toquen, sueltenme. ¿Y de qué entrega hablas?

Secuestrador: A ti te mandaron a secuestrar conmigo, y no sigas preguntando que no se porqué o para qué te mandaron a secuestar, pero lo que si sé, es que te tengo que entregar ya.

Yo llorando llorando le rogué, le supliqué, que no me entregará, pero al muy miserable no le importó mi dolor y solo decia.

Secuestrador: Lo siento mucho pero lo tengo que hacer o si no me arriesgo a perder la vida, y no me quiero morir tan joven.

Pues no parece que lo sientes, al parecer no tienes escrúpulos, ni corazón, vas a entregar a una joven con un futuro por delante a un no se quien, para que me haga no se qué. Como vas a poder dormir todas las noches ¿En serio no te da ni un poquito de pena?

Secuestrador: Yo solo cumplo con mi trabajo.

¿Y se puede saber quién rayo eres?

Secuestrador: No no se puede saber.

Luego mi secuestrador me tapó la boca con cinta, y después él y sus guardes pardas se fueron como por dos horas, y me dejaron solita en esa habitación, pero yo soy más inteligente que ellos y me solté con la esquina de la mesa, y cuando mi secuestrador entró otra vez a la habitación, yo le brinqué encima y lo golpié por haberme secuestrado, y yo estaba encima de él, y el me chocó de la pared y se quedó mirándome con una mirada muy sexy, y él estaba muy cerca de mi tan cerca pero tan cerca que yo podía escuchar su respiración.

Y él solo me miraba y me miraba, ¿Qué rayo me ves?

Y con una voz fuerte de un hombre de verdad me contestó.

Secuestrador: No nada, y ¿Cómo demonios te soltaste???

A ti no te importa.

Los hombres que trabajan para él, me volvieron a amarrar y después me sacaron de esa habitación, y cuando estaba en la sala vi a más hombres vestidos de negro, y estaban tomando y la casa era de lujo, todo muy lindo y también todos esos hombres estaban almados.