Una nueva fuente de felicidad

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Después de esto yo me sentía mal, no sentía la vida, como siempre he sido (y soy) una persona con tendencia depresiva; cada vez que veo a un hijo jugando con su padre me siento mal, como aislado y en mi mente me pregunto cómo se sentirá eso.

En visto de que necesitaba a alguien a mi lado para que me diera consuelo y me dijese la primera estupidez que se le ocurriese para sacarme una sonrisa, busqué en en una app para conocer gente. (si xD)

El tiempo pasó y conocí a una persona que, a día de hoy, no se que me hubiese pasado si no lo hubiese conocido...

Me sacaba 5 años pero no era de esos cachondos mentales que solo buscan encuentros y ya.
Su nombre es Kiko y es de Canarias (bueno de Tenerife)

Cada día antes de dormir rezo un... (no xD) me metía en el Whatsapp y me ponía a hablar con él; me contaba como le había ido el día y como estaba, luego yo le decía el mío y como estaba; era casi un código para saber si estábamos solos o no. (xD)

Había veces que solo decíamos tonterías tipo: "cuanto te quiero" y de que los dos deseamos vernos de una vez y estar juntos o cuando alguno (suelo ser yo xD) esta mal se lo dice al otro y éste le hace reír o, por lo menos, intenta aliviar la "carga" del otro llegando a un punto en el que uno no podía vivir sin el otro (no es coña, no era extremo pero siempre queríamos hablarnos).

Yo, al estar tantos años recibiendo "carga" por parte de los compañeros de clase o por parte familiar, cuando empecé con él estaba en una espiral de desprecio propio:
"nunca he tenido un cuerpo de los que gustan ver, mi sonrisa es horrible, no tengo nada bueno..."

Cuando empezamos a hablar, él siempre me decía que quería que fuese feliz con lo que tengo, que estaba muy bien y que mi sonrisa era preciosa... A las semanas nos quisimos ver y nos descargamos Skype en el móvil y hacíamos videollamadas para vernos; lo que recuerdo de eso era cuando me decía cosas hermosísimas y sonreía sonrojado, a lo cual él me decía cosas como: "hay que bobo eres" y me reía más...

Duramos 3 meses, pero, a día de hoy seguimos hablando y preocupándonos el uno del otro (eso se agradece).

Por si alguien se lo pregunta, yo corté esa relación aunque, como no quería que dejásemos de hablar, pues él consiguió que en verano me quitase la camisa y me bañase sin problemas; le debía TODO pues la seguridad es un don que de verdad cuesta recuperar, puesto que acabé enviando mensajes como libros (más de 8 filas seguro).

Corté porque sabía que nunca lograría olvidar a mi más sincero amor secreto, aunque sé que tengo que olvidarme de él porque es hetero... Simplemente no puedo, no puedo luchar contra mi corazón; son casi cuatro años colado por él, !jajajaja!).

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