Sentí mi rostro enrojecer al escuchar su voz, ni siquiera sé porque, sólo, un sentimiento de vergüenza se apoderó de mi.
-Tae -al momento de verlo una sonrisa se dibujó en mi rostro, él ya lo estaba haciendo.
-Creí que no hablabas en serio, digo... Eso de regresar, pensé que sólo mentías -me miró con curiosidad- ¿porqué lo haces? - señaló a los niños que estaban comiendo alegres y compartiendo con los demás lo que les había traído.
-Sólo tengo curiosidad, y quiero ayudarlos, quiero ayudarte.
Así que ¿podrías mostrarme el lugar?
Asintió sin borrar aquella hermosa sonrisa que calidez me hace sentir -Esta bien, pero también tienes que hablarme de ti
Lo seguí por todo el lugar, viendo mi alrededor, conociendo, le hacía saber mis dudas y él sin problema las respondía.
Supe que tienen huertos y gallineros, no tendrán grandes comidas pero tienen algo con que alimentarse.
-Todos aquí son amables, son felices, no importa que tan mal esté su situación, mientras se tengan los unos a los otros, todo estará bien
-yo tengo a mi familia y amigos, pero no me siento igual, es más, incluso me siento solo
-todo es diferente, tu familia tiene dinero, nadan en el ¿o me equivoco? -negué a su pregunta- a ellos sólo les importa eso, los lujos, la fama, no creo que les importe nada más, nadie más, ni el amor
-Ellos no me aman - bajé la mirada triste
-Puede que si, sólo están cegados
-Yo lo siento así - sentí sus brazos rodear me, al principio me tense, pero devolví el abrazo de inmediato.
-Yo no te dejaré solo -me separé un poco dedicándole una sonrisa.
-Gracias Tae, ahora tengo que regresar, debo hablar con mi papá
-¿puedo saber sobre qué?
-Lo sabrás pero no ahora
-bien, si pasa algo puedes venir, te esperaré con los brazos abiertos y un beso
Mis ojos se abrieron más que los de un búho o algo así -no digas esas cosas taehyung
-¿Qué tiene de malo? -reía, seguramente por mi mueca de vergüenza y mi rostro más colorado que... No sé, pero estaba estaba mal- nos vemos, mi adorable kookie
-Nos vemos -me fui sin voltear atrás, estaba muriendo.
***
-¿esta papá en casa? -le pregunte a Jin quien fue al primero que vi en cuanto entre
-Oh kook, llegaste -me sonríe- esta en su despacho, creo -sube las escaleras, de seguro dirigiéndose a su habitación.
Me fui al despacho de mi papá para poder hablar con él, espero acepte.
Di un leve golpe a la puerta y en seguida escuche un "pasa", por parte de mi padre. Entre y lo encontré leyendo unos papeles.
-Hola papá -alzó la mirada para poder verme
-Jungkook, hijo ¿qué pasa?
-Papá, ¿me compraría un departamento?
Ni una expresión en su rostro, eso me pone nervioso.
-¿porqué quieres un departamento?
Solté todo el aire que no sabía que tenía acumulado -Quisiera aprender a independizar me desde ahora, además conseguiría uno cerca de la universidad
Pude verlo asentir, tal parece lo convencí.
- Bien, te compraré el departamento pero tendrás que conseguir trabajo para poder comer, hacerte de gustos y todo eso. Sobre la universidad no te preocupes, seguiré pagándola yo
-Me parece perfecto -Sonreí asintiendo, era justo. Mañana después de la universidad buscaré trabajo, después hablaré con Tae -estúpido - susurré bajo con una sonrisa al recordar lo que había pasado antes y olvidando que seguía delante de mi papá.
-¿Qué dijiste?
-¿Eh? Nada, mañana mismo comenzaré a buscar todo -hice una venia avergonzado y me aleje hacia la puerta- Gracias papá, buenas noches
Salí del despacho y me dirigí a mi habitación con una enorme sonrisa. Tengo mucho que hacer mañana.
