¿Como llegamos a esto?
Pensaba un acelerado John Watson en situación, que era demasiado irreal y apenas podía siquiera creer. Sobre su agitado cuerpo estaba nada más ni menos que Sherlock Holmes. Igual o más agitado que él, repartía besos delicados, suaves, vírgenes, denotando la poca o nula experiencia del detective en el asunto.
John (Ya un poco harto de la poca experiencia del detective) lo tomó de la bufanda que llevaba puesta, y lo besó, de una manera hambrienta y demandante, como si hubiera esperado este momento toda su vida. Sherlock simplemente se dejo hacer, correspondiendo suavemente al beso, que poco a poco se iba volviendo más salvaje, más demandante. Que al cabo de unos momentos, el detective gemía en la boca del doctor. Lengua con lengua, explorando terrenos que hasta el momento eran desconocidos, la falta de aire se hizo presente y siendo descaradamente ignorada. Hasta que por fin se separaron, agitados y jadeantes.
No hicieron nada más que mirarse, Sherlock con un adorable sonrojo adornando su rostro. Y un John sonrojado, jadeante y expectante de lo que iba a pasar esa noche.
-John yo...- Dijo Sherlock con voz ronca- Lo siento yo... solo quería... yo...- De repente fue interrumpido por un apasionado beso por parte del medico que por poco y nublaba su visión.
-Cállate, dejemos que pasė lo que tenga que pasar y luego pensaremos en las consecuencias- Dijo mientras repartía besos pequeños en sus labios, mientras bajaba lentamente hacía su cuello, apartando la bufanda a su paso.
Sherlock gimió.
Complacido, John siguió haciendo gozoso su tarea mientras lamía, mordía y chupaba el cuello de un (evidentemente) excitado y jadeante Sherlock Holmes.
Bajo hasta su pecho aún cubierto por su elegante camisa de algodón, el sweater negro quedo en la planta baja hace un buen rato. Poco a poco desabotonaba la camisa, mientras el moreno lanzaba improperios en voz baja. Cuando la camisa dejo de ser un obstáculo, se quitó su camisa de un jalón, se acercó y besó al moreno. Sherlock correspondiendo al beso lo abrazó por el cuello, tomando el cabello rubio de John. Al separarse se miraron, ojos azúl imposible chocaron con azúl cielo. John bajo de nuevo al pecho de Sherlock y empezó a lamer uno de los pezones de este. Sherlock soltó un gemido bastante audible mientras tomaba con fuerza el rubio cabello casi cenizo del otro. John sonrió complacido.
-Que ¡Ah! qu-que p-paso con tu nhgh mal-dito acto de ''n-no soy gay''- Vaya que le había costado articular esa oración eso significa que el medico hacia bien su trabajo.
-Lo mandaste al diablo desde el primer beso- Dijo mientras regresaba a su tarea.
Ya era suficiente.
Recostó al detective en la cama y empezó a bajar con besos, lamidas y chupetones. Era simplemente demasiado. Llegando a la orilla del pantalón, lo empezó a bajar, con la mirada sorprendida de Sherlock mientras lo hacía.
Lo bajo completamente y Sherlock no podia estar más avergonzado.
-Espera...- Musito levemente Sherlock, mientras se apartaba un poco y cubría su rostro con ambas manos.
John sonrió, era muy difícil ver al gran Sherlock Holmes avergonzado, incluso se le hizo tierno.
-¿Estas bien, te pasa algo?- Dijo John en un susurro apenas audible, como si de un niño pequeño se tratase.
-Lo-lo siento, es que es la primera vez que hago algo asi- Dijo un Sherlock aun más avergonzado.
-Dime algo que no sepa- Dijo el medico devertido por la actitud del detective.
-Jodete...- Gruño Sherlock.
-¿Quieres seguir?- Pregunto John dubitativo, por que ¡Demonios!, el quería seguir pero no lo haría contra la voluntad de Sherlock.