Atentamente: una chica rara.

23.

Si antes retrocedíamos, ahora parecía que corríamos, era tan hermoso recibir mensajes de buenos días y buenas noches a diario sin excepción alguna, era la primera clase y como siempre nuestros lugares al final de la fila nos permitía platicar sin que ningún profesor se diera cuenta, sin embargo el profesor de historia dijo: "esa parejita de atrás se separa por favor" yo me sonroje demasiado mientras tú solo me guiñaste un ojo, no sé si era posible pero sentí que me sonroje aún más.

Atentamente: una chica rara.