Antes de la guerra {Saint Seiya}

Un día cualquiera

Eran aproximadamente las 12 am en el santuario de Atenas, un niño de aproximadamente 8 años se encontraba entrenando junto a su hermano mayor. Al pequeño le costaba seguirle el ritmo al otro.
-No puedo Aioros, no podré convertirme en caballero, soy muy debil, jamás seré tan fuerte como tú.
-No te rindas Aioria, yo confío en que algún día serás igual o más fuerte que yo.
-Eso es imposible.
-No lo es, ¡Vamos a seguir entrenando!
Asi pasaron unas horas el par de hermanos entrenando hasta que les dió hambre.
-Muero de hambre hermano.
-Vamos al templo, hoy prepararé algo especial.
-¡Genial! ¿Podemos invitar a Shura?
-Pero claro que si.
-Iré a buscarlo- El pequeño Aioria salió corriendo a buscar al recien nombrado santo de Capricornio.
-¡Shura!
-¿Que pasa Ai?- Dijo el capricorniano que se encontraba limpiando a las afueras de su templo.
-Mi hermano y yo te queremos invitar a almorzar.
-¿Encerio?
-¡Si!
-Ok, iré.
-Vamos, nos estan esperando.
Ambos caminaron juntos hasta el templo de Sagitario, donde Aioros los esperaba con la comida. Aioria y Shura se sentaron en la mesa mientras el sagitariano servía.
Durante el almuerzo hablaron de diversas cosas, desde los entrenamientos del más pequeño hasta como el mayor habia conseguido la armadura de Sagitario.
-¡Aioros cocinas delicioso!- Exclamó el pequeño.
-Y no miente, de verdad estaba delicioso.
-Ya paren chicos que me sonrojo- Dijo el hermano mayor poniendose ambas manos en las mejillas en una pise algo comica.
-¿Aioros, has visto a Saga?
-No Shura, salió a una misión hace un par de días y no lo he vuelto a ver.
-¿Hablaban de mi?- Por la puerta de la habitación apareció el caballero de Géminis, Saga.
-¡Saga!- Dijo el Sagitariano corriendo a abrazar a su mejor amigo.
-No tan fuerte que me rompes la espalda.
-Perdon.
-Hola Shura, hola pequeño- Saga saludó a Aioria quien estaba escondido detrás de Shura.
-¿Que pasa Aioria?- Preguntó Aioros.
-El señor Saga me da miedo.
-No te preocupes, Saga tiene cara de ogro pero no te hará nada- Aioros recibió un fuerte codazo en las costillas por parte del geminiano.
-Perdón, perdón.
-Pues si yo tengo cara de ogro, tu tienes cara de duende.
-No peleen, sois mejores amigos, trataros un poco más amablemente.
-¿Así como tu te tratas con Death Mask?
-.... Bueno, no tan así, pero sabeis a lo que me refiero.
-Ajá.
Terminando de comer, lavaron los trastes, el capricorniano estaba tan concentrado que ni si quiera se dio cuenta cuando lo dejaron solo lavando solo.
-¡Me cago en la puta!
Shura salió corriendo a buscar a los fugitivos.
-¡Vengan acá antes de que los corte a la mitad a los dos!
Luego de una persecución, y curar unas cuantas cortadas, terninaron de lavar todo.
Al final, todos volvieron a sus respectivas tareas.
Mientras tanto, en la sala del patriarca, Shion hablaba con uno de sus guardias.
-Señor, el próximo lunes llegaran los nuevos aspirantes para santos de oro.
-Muy bien, informale a los caballeros de Géminis, Capricornio y Sagitario de esto, necesito que ellos los reciban.
-¿Y que pasa con los otros dos jovenes, Aioria y Angelo?
-Ellos se quedaran conmigo mientras los tres santos traen a los demás.

*-*-*-**-*-*-*-*-*-*
Las palabras en negrita y cursiva es porque estan hablando en su idioma natal.