Me desperté entusiasmada por qué ¡hoy es mi decimosexto cumpleaños! Si, hoy cumplo 16 años, me encamino hacia el espejo, para mirar mi cabello que parece la melena de un león aunque sea de pelo lizo, me dirijo hacia mi cuarto de baño, pongo el agua caliente, al principio sale tan fría que casi grito, ya terminada mi ducha me dirijo a la puerta de mi vestidor cuando se escucha un grito de niña abajo, salgo corriendo con la mano agarrando la toalla para que no se me caiga entro corriendo en la cocina y me encontró a mi hermano mediano con un delantal rosita mama con unas manoplas a juego, y con una tarta en el suelo esparramada.
– ¡Me cago en la puta! – Dice Andrés con una expresión de enfado en su rostro.
Lo único que puedo hacer yo es solar una tremenda carcajada que se escucha en toda la casa, haciendo que Andrés suba la mirada y me mire fulminándome, cuando consigo para de reírme y de poder respirar normal lo miro.
– ¿Ese gritito de nena era tuyo? ¿Y, que estás haciendo? – Le pregunto señalando con el dedo.
– Perdona ese gritito era de un macho rudo pecho peludo –me contesta dándose una palma en el pecho – Y estamos haciéndote una tarta de cumpleaños. –
– ¿Estamos?
– Si estamos – contesta Alex el menor de los hermano situándose en mi campo de visión – Estábamos los tres pero Alan salió a hablar por el teléfono con alguna de sus conquistas.
– ¡Que monos! Me estabais haciendo una tarta que lindos hermanos tengo.
Me acerco a ellos y los abrazo uno por uno dándoles un beso en la mejilla, cuando me alejo los veo a los dos sonrojarse.
– ¿Qué pasa? –pregunto con el ceño fruncido.
– Eh... esto... estas en toalla –contesta Alex tartamudeando.
Miro hacia abajo y veo un pecho casi descubierto o mierda me pongo roja con un tomate, y salgo corriendo a mi habitación gritando lo siento, que vergüenza, no me acorde de que estaba en toalla, nunca desde que me adoptaron me habiendo visto en toalla o desnuda.
Desde que llegue a esta casa a los 7 años no me han visto ni en bikini, por favor que vergüenza y que descuido por mi parte encima hoy en mí cumple que ilusión por favor.
Me apresuro a vestirme con un vaquero negro ajustado una camisa blanca con mi chaqueta de cuero y mis vans negras, me mire al espejo aprobando mi look, me dirijo hacia el baño para arreglarme el cabello y para aplicarme un poco de rímel y de gloss en los labios.
Cada vez que bajaba un escalón de la escalera se me iban colorando las mejillas hay por favor que vergüenza lo positivo de esto es que menos mal que Alan no estaba en la cocina porque si no, no pararía de recordarme que hermoso cuerpo que tengo no es por echarme flores pero mi cabello es lizo largo y castaño rojizo, mi tez es blanca, con ojos entre verdosos y azulados , y tengo bastante pecho, trasero y curvas aunque no me guste presumir saque el cuerpo de mi madre colombiana tenía que ser y el color de la piel y de mis ojos de mi padre alemán y sobre todo bajita ya que mido 1,50 cm.
– ¡Joder! Como es eso que me perdí a Katherina en toalla – gruño Alan cuando entraba a la cocina, al verme se cayó – Hola hermanita linda feliz cumpleaños.
Me cargo en brazos dando vueltas sobre sí mismo haciéndome reír, cuando mis pies tocaron el suelo le di un beso en la mejilla.
– Gracias Alan, ha sido un detalle que hayan intentado hacer una tarta para mí –comente mirándolos a todos – Oye chicos tengo hambre, hacemos comida o me invitan a comer por ahí antes del ir a el instituto.
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Hard Choise {Pausada}
Teen FictionElecciones tomas todos los días, sobre que vas a desayunar, que ropa ponerte, que película ver... Pero cuando tienes que hacer una elección, que cambiara toda tu vida... es mucho mas difícil.