La Noche.

Capitulo 10: Estrellita

Miro al cielo y Luna esta alli otra vez, transimitiendo brillo, enamorando estrellas, lo que hace siempre. Ahora mi reaccion al mirar el cielo es desepcionante. Lo volvio a hacer, me destruyo otra vez, deje que lo hiciera una vez mas. Creo que entre mas te importe mas te lastima. Me olvidaste muy rapido Luna, muy rapido. Mi cabeza sigue repitiendo todo lo que me decias, todas esas palabras que por un momento yo crei que eran ciertas, odio tener que vivir asi siempre pero en verdad no se como cambiarlo, ojala y algun dia puedas entender como me siento. Me he dado cuenta de que puedo ser controlado, asi como luna controla el universo, luna me controla a mi. ¿Que se sentira poder serlo todo? Tener todo a tu mando, poderlo tener todo y ser todo de todo. Tenerlo todo es nada, tienes todo tan fácil que no valoras lo que te llega y sigues buscando felicidad, y esperando ese milagro del amor o lo que sea, pero eso lo escoges tu, nadie más. No quiero que sufras luna, no quiero, pero si tu prefieres seguir así, adelante, debes recordar que por las que me tires, pises, destroces, siempre habrá un pedazo de mi que seguirá cayendo a tus pies. La noche es difícil, y mucho, pero ya estoy cansado de evitarlo.

En eso vi como una estrella bajaba lentamente del cielo y se acercaba a mi, no tenía miedo, no es la primera vez que sucede, pero la pregunta que invade mi mente es
¿Porque se dirige hacia mi?

-¿Lobito?- me dice mientras sus pies tocan en suelo.

No se a que se refería, y conteste.

-¿Si?- mis nervios llenaban mi cuerpo, y miedo comenzaba a notarse, no podía ver su cara, era totalmente blanca, brilla de una forma preciosa.

-Te he visto sufrir desde arriba, y creo saber bien porque.-

-He sufrido de lo mismo por mucho tiempo, es raro que apenas lo notes.-

No me importaba mucho ser directo, mi carácter y sentimientos creo que se quedaron destruidos en el suelo.

-Luna ¿cierto?-

Mi corazón sigue latiendo mucho al escuchar su nombre, es algo que no puedo controlar.

-Asi es. Sufro por la única y magnífica luna.-

Al contestarle su mirada se desvió hacia abajo, e hizo un movimiento en los labios.

-¿Sabías que también sufre?-