[One-Shot] La Ultima Orden

La Ultima Orden

Una fría noche en que los copos de nieve caían sobre el frío Londres,  viendo la escena un pequeňo conde mirando hacia el cielo ya por última vez, suspiraba leve, ya sintiendo lo que ocurriría en unos minutos, se volteaba lentamente hacia su mayordomo el cual estaba de pie,  derecho con una postura elegante y refinada como siempre, tal era y siempre fue su excelente y hábil mayordomo; el pequeňo conde no mostraba pena, tristeza alguna, pues ya es el destino que el mismo eligió y no se arrepiente de nada, Sebastian por su lado solo miraba a su amo el cual no decía ninguna sola palabra, ya que sólo veía los copos caer y como formaban una alfombra blanca a su alrededor.

-Ya todo acabo... -Por fin decía el muchacho, ya casi helado por ese frío invierno que le rodeaba-
-Si, ya todo a terminado Bocchan... -Se dedicó a decir el mayordomo de negro con una voz Serena y su típica sonrisa-
-Un contrato, es un contrato... Así que puedes llevártela... -Decía el pequeňo conde aún desviando la mirada algo nostálgico-
-Ciertamente, un contrato es un contrato, pero le ocurre algo ¿Bocchan? Le veo cabizbajo
-No me digas más amo, ya no lo soy...! ¿¡Sebastián que esperas!? -Algo la mirada para toparse con esos ojos rojo carmesí de su acomoaňante- Pero solo una cosa...
-¿Que cosa? -Le decía firme este al pequeňo que se encontraba a su frente-
-Sebastian, tu nombre es Sebastian...
-Es el nombre que Bocchan me dio -decía entre una leve sonrisa-
-Yo,  Ciel Phantomhive te nombre Sebastian, nombre con ese nombre a mi mayordomo como demonio, pero ese nombre no es en vano...  no para mi...
-¿Bocchan?
-Sebastian... Esta es mi última Orden... Yo que te eh dado nombre te ordenó que ese nombre perdure para siempre en la eternidad contigo!  Para siempre tu nombre fue y será Sebastián! -Diciendo esto, callo en la fría nieve de rodillas ya no soportando el frio-
-Bocchan...  -Caminando hacia el para luego cargarlo-...  Yes, me lord...

La noche cada ves más espesa como si la neblina misma abrazada a esos dos en mitad de la noche, el mayordomo caminando junto al pequeňo conde dormido ya, se dirigía a la isla donde terminaría con la existencia de su amo, el frío no era nada en comparación con un sentimiento que brotaba rápidamente por el demonio, viendo a su amo dormido en su pecho, pero este solo le miraba.
-Gracias... Sebastián - apenas se escucho eso de los fríos labios del pequeňo, pero no pudo evitar lograr una pequeňo sonrisa en el rostro nostálgico de su mayordomo el cual seria propietario de su alma-
"Como lo prometí Bocchan, estaré a su lado... Hasta el día en que su vida, terminé"

Fin.

Bueno espero que les haya gustado esta pequeňa historia, referente más bien a una simple teoría del final de kuroshitsuji.
Gracias de antemano :)