Pétalos marchitos.

Otoño

Te fuiste hace siete atardeceres
Y hace ocho amaneceres
Que el árbol no florece.
Quizas te llevaste sus flores
O quizas el árbol se fue contigo.
Quizas, y solo quizas,
Nunca te hayas ido.

Tengo relojes de arena
exparcidos por la habitación
Y pétalos de flores marchitas exparcidos en el corazón.
Tengo recuerdos tuyos
de los que no me puedo despegar
me siguen a todas partes,
ellos te quieren encontrar.

Tu voz en el aire sopla
como una brisa sobre el mar
Las aves cantando te acompañan
Proclamando tu libertad.
Las ramas de los árboles secos
se quiebran sin cesar
Al igual que mis sentimientos rotos,
Pues ya descubrieron que no volverás.

El jardín que tan bien te definía
Tu ausencia parece notar.
Las flores se han escondido
Y las mariposas allá igual.
El pasto a la tierra desnuda ha dejado
Y el perfume de tus petalos ya no está
Las aves que alguna vez me despertaron
Parece que solo las escucho
Atormentadas en mi soledad.

No se si has notado que es enero en este frío lugar
Mas bien pareciera que el verano nunca llegará.

Voy perdiendo color,
Las hojas secas se me van cayendo
Y aunque en este lugar sea enero
Yo vivo en un otoño eterno.