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-¿Qué te parece?- Dijo Jungkook enseñándole las nuevas calificaciones.
-¡Oh, tienes todo con un bien! ¡Buen trabajo!- Taehyung le felicitó.
-Bien, tú sabes. Si me lo propongo, ni siquiera tengo que esforzarme.- Comenzó a reír con felicidad fuertemente.
-No te dejes llevar ahora.- Le advirtió Taehyung.
Jungkook se dio la vuelta mirándole con aire superior, pero a la misma vez feliz por estar subiendo rápidamente de puntuaciones. Tenía el flequillo enganchado en la cabeza con pinzas de forma que no le molestase al escribir y/o estudiar. -¿Dejarme llevar? ¡Es mi propio esfuerzo!- Pero él sabía que no era así, lo que pasaba era que Taehyung era mejor que los profesores de su escuela enseñando, incluso diría que es el mejor.
-Hoseok se alegrará, estoy seguro.- Cerró los ojos mientras decía esto. -Quiero que pases para ver su sonrisa.- Dijo sonriendo como un tonto y se sentó en el sofá de la pequeña habitación.
-Taehyung, ¿de verdad quieres tanto a mi hermano?
-¿A qué viene eso tan repentinamente?
-Te estoy preguntando si lo quieres.- Dijo Jungkook sin mirarle, prestándole más atención a su escritorio.
-No tienes nada de lo que preocuparte. Esto es completamente unilateral. Ese libro que leíste es sólo mi fantasía.- Respondió con su típica tranquilidad.
-P-Pero tú sabes... Que él ya tiene novia.- Contestó volviéndose a mirarle.
-Sí, lo sé.- Taehyung seguía mirando las notas con una sonrisa, seguramente pensando en Hoseok. -Permanecer al lado de la persona que amas es uno de los privilegios de ser amigo.
-Si de verdad lo amas, deberías sacar a su novia del camino y ser el número uno.- Jungkook no sabía lo que decía, sólo quería que triunfase el amor.
-Aún eres muy joven. Él significa mucho para mí. Por eso no querría que me odiara.
Jungkook empezaba a comprender que Taehyung nunca haría nada que su hermano no quisiera. Observaba cómo le daba golpecitos a la cabeza de sus ositos de peluche, uno pequeñito que estaba a su mismo lado y otro mayor que estaba al lado del pequeño. Taehyung trataba a Hoseok amablemente, preciosamente, como si fuera una joya. Pero su hermano sólo lo ve como un amigo. Aun así, él es serio y ciegamente devoto. Jungkook se dio la vuelta con el respaldo en las manos, sentado del revés, haciendo uso de los engranajes de la silla.
-Que idiota.- Susurró casi inaudible. Para él esa situación era demasiado dolorosa.
***
-¡Oh! ¡I-Impresionante!- Jungkook estaba en medio de la calle con sus notas en las manos, lleno de alegría. Tenía todas las secciones con notables. -¡Semejante incremento en tan corto tiempo! ¡Quizá de verdad soy un genio!- Dijo con lágrimas de felicidad en los ojos. -¡Soy como un león dormido que ha despertado!
Por fin tenía una posibilidad en Mitsuhashi, quería avisar a Taehyung en seguida. Salió corriendo en dirección al apartamento que ellos tenían en común pensando en que quería verlo, quería que lo elogiara, le dijera lo bien que ha progresado.
Se paró en seco dándose cuenta de que se le estaba yendo la cabeza. No sabía lo que acababa de decir. ¿Quería ir a ver a Taehyung? ¿Quería avisarle? ¿Qué sucedió con esa carrera alegre al atardecer? ¡Hoseok es al que debería de ir corriendo a ver! Jungkook seguía negándolo en su cabeza, no podía estar pasando.
-¡A MI NO ME GUSTAN LOS HOMBRES!- Gritó en medio de la calle en la que se había parado. Todo el mundo se le quedó mirando con cara de '¿Qué le pasa a aquel chico?'
-¿Qué estás haciendo?- Apareció Taehyung detrás suya, cual pokémon salvaje.
-¡O-Oh! ¡Maestro! ¿Cómo está su excelencia?- Preguntó Jungkook muy nervioso, Taehyung podría haber escuchado eso que había gritado a los cuatro vientos.
-Suena como si necesitaras estudiar un poco de literatura antigua.- Respondió Taehyung. -Bien, de cualquier manera, es mejor que nos pongamos en marcha. Vamos a casa juntos. Compré un pastel.- Dijo enseñando una caja en la que estaba el pastel. -Hoy es el cumpleaños de Hoseok.
Jungkook se sorprendió, no había recordado el cumpleaños de su hermano. Se preocupaba tanto por progresar que lo olvidó completamente.
-Te ves como si lo hubieras olvidado.- Le hizo despertar Taehyung.
-¡Po-Por supuesto que no lo olvidé!- Respondió Jungkook quitándole la bolsa con el pastel a Taehyung. -Obtuve esto hoy.- Dijo sin ánimos entregándole la hoja con sus notas.
Cuando Taehyung terminó de verlas le revolvió el pelo, en señal de que se alegraba por él. Aunque Jungkook siempre se quejaba. -¡Buen trabajo!- Dijo con una sonrisa.
El corazón de Jungkook estaba latiendo fuertemente, éste se preguntaba que qué le pasaba. Se sonrojó levemente por la caricia de Taehyung mientras pensaba qué era lo que estaba cambiando de él. Seguía diciendo que sólo le elogió porque su hermano estaría orgulloso de él.
***
-Ya estoy en cas... ¡Wah!- Dijo Hoseok cuando entró a su casa. Se encontró con una fiesta sorpresa por parte de Jungkook y Taehyung, que estaban delante suya sonriendo por su reacción.
-¡Feliz cumpleaños, Hoseok!- Le felicitó Taehyung.
-¡Feliz cumpleaños!- Le felicitó Jungkook dando palmas.
-¡Qué festín! ¡Gracias!
-Toma, este es un regalo mío.- Le dijo Taehyung extendiendo su mano con una pequeña caja en ella. -Querías ese reloj que vimos juntos antes, ¿no es verdad?
-¿Eh? ¡Pero debió de ser realmente caro!- Mencionó Hoseok sorprendido.
-Un artículo lujoso por año no te matará.- Respondió Taehyung sonriendo.
-¡Muchas gracias, Taehyung!
Jungkook miraba la escena desde otro lado, pensando en el comportamiento de Taehyung cuando está con su hermano. No sabía cómo era capaz de soportar tal cosa. A él le dolería demasiado el no ser correspondido por la persona a la que ama y además tener que ser su amigo y soportar que tiene otra pareja que no es él. -¡Hoseok, olvidaste cerrar la puerta!- Dijo Jungkook cuando escuchó un ruido.
Cuando salió de la habitación se encontró con una chica. -Oh, perdón.- Dijo ella. Jungkook tenía en el rostro una mezcla de sorpresa y confusión.
-Ah, es verdad. Tengo algo muy importante que decirte.- Dijo Hoseok hablando con su hermano. -Estoy feliz de que estés aquí también, Taehyung. ¡Vamos, déjame ir!- Le pidió a Taehyung, con el que salía de la habitación, que le tenía agarrado y no quería dejarlo en paz.
Hoseok se colocó a un lado de la chica y la abrazó por los hombros. -Ella es Kang Jihyun (para los que no sepan quién es, es Soyou de Sistar).- Ella se inclinó en forma de saludo. -Nosotros decidimos casarnos.
A Jungkook y Taehyung se les abrieron los ojos de sorpresa, no especialmente una sorpresa muy buena.
-¡Eso es genial! ¡Por fin lo hiciste Hoseok!- Le felicitó Taehyung yendo hacia él para darle unas palmadas de satisfacción, pero en realidad estaba llorando por dentro. -Es muy linda.
-Gracias.- Respondió Hoseok. -Realmente me alegra que tú estés feliz también. Quería que fueras la primera persona en conocerla.
Jungkook se quedó en el mismo sitio en el que estaba antes, paralizado. Él sentía y hacía salir el dolor que no exteriorizaba Taehyung. Golpeó con su puño la pared desde el sitio en el que estaba.
-¿Jungkook?- Hoseok estaba preocupado por su reacción.
-... Por más.- Eso fue lo único que dijo Jungkook.
Todos se quedaron mirándole confundidos, no entendían lo que había dicho. -La bebida se acabó, iré a comprar más.- Siguió diciendo.
-No le venderán a un menor.- Le dijo su hermano.
Jungkook cogió la mano de Taehyung y salió corriendo. -Taehyung, ven conmigo.- Salieron de la casa a toda prisa con las miradas de su hermano y su prometida que los miraban confundidos.
***
Se encontraban en la calle. Jungkook estaba llorando dándole la espalda a Taehyung, mirando a una farola. Estaba encorvado hacia delante apoyando sus manos en sus muslos. Sus lágrimas recorrían su cara y caían en su pantalón. -Lo siento...- Dijo Jungkook.
-¿Por qué te disculpas?- Le preguntó el contrario mirándolo desde detrás.
-¡Porque eso fue... muy cruel!- Respondió entrecortado por su llanto. -¡Has estado enamorado de él todo el tiempo! Siempre lo cuidaste y aun así... ¿¡Él quería presentártela primero!? Fue muy insensible... ¡Esta es la primera vez que he querido golpear a mi hermano!- Intentaba parar de llorar limpiándose las lágrimas, pero era imposible.
-Esa es una manera de llorar un poco sucia, ¿no?- Dijo Taehyung intentando animarle.
-¡Estoy llorando por tu culpa! ¡Una vez que empiezo a llorar, por más que quiera no puedo detenerme!- Respondió dándose la vuelta.
-Ya veo...- Taehyung le volvió a dar palmaditas en la cabeza para que estuviese tranquilo, se le había ocurrido una forma para que dejase de llorar.
Le agarró de las muñecas a ambos lados de la cabeza y le besó. Puso sus manos en la cara de Jungkook y lo apoyó contra la farola. Jungkook se dejó besar y no pudo ninguna resistencia. Se separaron después de un pequeño momento. -Te detuviste...- Dijo Taehyung cerca de él. -Perdón, sólo un poco...- Volvió a hablar antes de abrazarle.
Jungkook estaba más rojo que un tomate. Estaba pasmado ante lo que acababa de hacer. Ahora Taehyung se encontraba llorando en su hombro. Decidió corresponder el abrazo y se quedaron así por mucho tiempo. -Te diré algo, jamás he llorado delante de nadie desde que nací. Excepto tú.- Confesó Taehyung. -No permitiría a nadie verme de esta manera... Nada más que a ti...
Jungkook sintió esas cálidas lágrimas sobre su hombro, y extrañas emociones empezaron a crecer dentro de él. Quería estar junto a él por siempre. Quería convertirse en alguien especial para él. Pensamientos como esos iban de un lado a otro en su cabeza y él de pie ahí, incapaz de alejar sus brazos y dejarlo ir.
***
Jungkook se estaba preparando para su primer día de universidad. Por fin fue capaz de entrar a Mitsuhashi. Terminó de colocarse el pelo hacia arriba, parecía totalmente otra persona. -¡Sí! ¡Perfecto!
Justo en ese momento Taehyung llegó y le estropeó el peinado revolviéndole el pelo. -No te creas la gran cosa 'suplente'.
-¡Cállate, fui aceptado! ¡Eso es lo que importa!- Jungkook se cabreó porque le chafó el peinado de John Travolta.
-Incluso al haber entrado cubriendo una vacante, nadie se dará cuenta de que eres un suplente.- Taehyung se encogió de hombros. -Y si te gradúas, incluso un suplente...
-¡Deja de decir suplente, suplente!- Dijo Jungkook bastante molesto. -Caray...- Salió del baño y se dispuso a ponerse la corbata.
Ese día fue el que el contrato de su apartamento expiró, su hermano fue transferido a Osaka. No sabía a qué venía todo esto, pero temporalmente Jungkook se quedará en casa de Taehyung.
Mientras Jungkook pensaba no sabía lo que estaba haciendo con la corbata. Había hecho tal nudo que no podía subírsela hasta el cuello. -¿Eh?
-Oye, oye. ¿Cómo te has atado eso?- Dijo Taehyung viniendo por detrás. Le cogió de las manos desde detrás y le enseñó. -Lo haré por ti, mira de cerca.
-Está bien.
Taehyung se dio cuenta de que también tiene mal abotonada la camisa, se había saltado un botón. -Te abotonaste mal. En qué estarías pensando. ¡Vamos, quítatelo!- Dijo desabotonándole la camisa.
-¡Lo haré yo solo! ¡Es sólo que no prestaba atención! Además, si no me apresuro llegaré tarde a la ceremonia de inauguración.- Dijo Jungkook tratando de excusarse, ya se veía venir a Taehyung desde lejos.
-No te preocupes, son sólo cinco minutos a Mitsuhashi en mi deportivo rojo.- Taehyung los hizo sentarse en el sillón.
-E-Espera un momento. ¿Estás medio dormido otra vez?
Taehyung le dio un pequeño beso en la mejilla. -Considera esto un honor. ¿Aún no entiendes exactamente qué significa tener a Taehyung rendido por ti?
-¡Ni tampoco quiero entenderlo!- Jungkook tenía miedo de lo que le podía hacer este pervertido. -¿¡Q-Que haces!? ¡Basta ya! ¡Oye! ¡Te dije que pares!- Dijo Jungkook mientras Taehyung le toqueteaba por todas partes.
En el momento en que sintió compasión por ese puro y romántico corazón, su destino fue sellado. Jungkook cada vez está más seguro de que se ha mudado a un lugar muy peligroso...
-¡Estúpido Taehyung!- Dijo levantándose y yéndose por la puerta hacia la inauguración de su nueva universidad, Mitsuhashi.
Bonus.
-Oye... ¿Por qué llamaste a tu oso Suzuki?- Preguntó Jungkook, se encontraban sentados en los sofás del salón, uno frente a otro. Jungkook estaba estudiando y Taehyung leyendo.
-Tuve otras opciones en mente. Pero al final Suzuki es el nombre familiar y más común en Japón, su significado es ambos, popular y ordinario. Eso era lo que estaba buscando, así que elegí ese nombre para él con mucho respeto.- Respondió Taehyung parando su lectura.
-Ya veo...
-Compite con el número de Suzukis en Japón. He acumulado muchos.- Señaló a la espalda de Jungkook y éste se giró. Topó con unos veinte otros osos de diferentes tamaños pero todos exactamente iguales.
-Pero... Satou es el nombre más común.- Respondió Jungkook.

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