Segunda oportunidad

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Días después de aquel hermoso momento que viví, pasando por el centro comercial , vi a esa dulce mujer;pensaba que era un sueño, de esos donde uno no quiere despertar.
Me armé de valor y la seguí,créo que ella se dió cuenta de que la estaba siguiendo, ya que empezó a acelerar sus pasos.
Tanto acelero sus pasos que cuando intentó cruzar la acera no se percató de que un carro se aproximaba; yo al darme cuenta, corrí lo más rápido que pude y la empujé hacia adelante.
Ella tenía ganas de gritarme por haberla empujado, pero al darse cuenta de lo que había sucedido, me ayudó a levantarme ya que el carro me había empujado unos dos metros por el choque entre los dos; pero el problema era de que el golpe me dejó lesionada la pierna.
Tuvieron que llevarme en una ambulancia al hospital, pero lo mejor de todo era que ella iba a mi lado.
De un momento a otro , ella me dijo:
¿Por qué me seguias?
A lo que yo le respondí:
-Hace un tiempo te vi cruzando la acera, y yo tenía ganas de conocerte, pero no tuve el valor de hablarte. Hoy al verte, pensé que era la oportunidad de hacerlo, y por eso te seguí.
A lo que ella respondió:
-Yo al verte también quize hacer lo mismo, pero tampoco tuve las agallas de hacerlo.
En ese momento fijamos miradas y acercamos nuestros rostros, haciendo que nuestros labios se rosen.
Sentí que era una segunda oportunidad

Nuestro amor es imposibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora