Episodio 4: El señor amable

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Una cortina de abertura con música contagiosa después...

Las luces estaban apagadas en el estudio, y Martín revisaba una vez más su libreto televisivo.

¡Martín al aire! ―gritó Julio, el productor de origen boliviano, detrás de cámaras, encendiendo así las luces del lugar.

―Hola amigos de Latin Minutos ―comenzó a decir el argentino mirando a la cámara―, soy Martín Hernández y antes de empezar, ¡quiero compartir con ustedes una noticia re-especial! La nominación al premio Señor Amable ―y una música épica sonó al decir eso.

―Los candidatos son ―retomó el rubio con una segunda pantalla a su lado la cual mostraba las fotos de los participantes―: Kiku Honda; Vash Zwingli; un desconocido de apellido Williams del cual ni siquiera tenemos la foto; y... ¡cha-cha-cha-cháaan! ¡Yo! Es decir, Martín Hernández~ ―y ampliando su imagen en la segunda pantalla, el argentino se autonombró. Con humildad, por supuesto.

―Junto con agradecer mi nominación ―prosiguió―, creo que realmente me merezco el título de Señor Amable, porque precisamente tengo la característica de ser muy-.

―Martín, Martín ―interrumpió Julio, apareciendo en pantalla, con su inseparable poncho y los auriculares de producción―. Los titulares.

― ¡Ay, dejáme terminar, che! Eh, como les decía, soy extremadamente re-simpático, tal y como mis amigos dicen-

― ¡Martín!

―Argh, está bien... Los titulares... En el programa de hoy veremos...

TITULARES

"¡Un pueblo entero trata de batir un extraño récord!; José Manuel González investiga a los malvados traficantes de animales; ¡y vean como yo mismo seguramente gano el premio al Sr. Amable~!"

―Ay, gracias, gracias, gracias... Y como nuevo Señor Amable quiero agradecer a tanta gente que ha hecho posible que yo haya sido elegido de manera tan indiscutible... ―ensayaba Martín su discurso al volver a la pantalla.

― ¡Martín al aire!

―Ay sí, por favor no aplaudan~. Ah~, no lo merezco~, me da un poco de vergüenza inclusi-

―Martín... ―dijo Julio al llegar al lado del rubio.

―Oh, pero amigo Julio Paz, ¿cuál es el problema? ―le preguntó interesado Martín.

― ¿Podrías ser tan amable de presentar lo que viene?

―... ¡Pero presentálo vos, por favor chabón! ¡Siempre quisiste ser presentador!

―Eh... ¿enserio...? ―preguntó dudoso el más bajo.

― ¡Sí, enserio! ¡Aprovechá esta oportunidad!

―... Pero qué amable...

―Aah~, y por eso estoy tan nominado al premio Señor Amable~. ¡Y espero que los jueces estén mirando mi desinteresado gesto! ―comenzó a decir Martín a un lugar fuera de las cámaras antes de volver a dirigirse al productor―. Dale amigo Julio, dale.

Julio miraba un poco sonrojado hacia la cámara, comenzando a sudar de los nervios. ―P-pero... Bueno... Eh... Ahora... Veamos la fabulosa encuesta de Daniel de Irala y... y... ah... ―fue lo que dijo entre balbuceos antes de caer desmayado.

―Creo que la emoción fue mucha... ―comentó suavemente el argentino viendo el cuerpo de su amigo tras el mesón―. Corre video.

―Ugh...

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⏰ Última actualización: May 06, 2016 ⏰

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