De pronto sentí mi mejilla arder; acababa de darme una bofetada.
- Ahora Tyler y yo nos tenemos que ir. Vamos a dejar la puerta y todas las salidas posibles, incluyendo ventanas, cerradas con llave. Y por si acaso, en alguna vez en la que no estemos en casa o lo que sea, se os ocurre escapar o al menos lo intentáis, os juro que iremos detrás de vosotras, y no os trataremos precisamente bien. ¿Entendido?
Asentí bastante llena de miedo y salió de la habitación. Fue a la de Valeria y vi como se marchaban él y Tyler de la casa.
Al irse, fui con Val y nos quedamos juntas sentadas en su cama.
La abracé apoyándome en su hombro y contándole lo que acababa de pasar con Hayes, y me dijo que ella no tenía ninguna marca de golpes, es decir, sólo me habían pegado a mi.Nos levantamos y salimos de allí para bajar al salón. La casa parecía realmente enorme, pero ahora mismo ni tenía ganas ni era el momento para explorarla.
Nos sentamos en el sofá y encendimos la televisión. Estaban emitiendo una película de miedo que ya habíamos visto varias veces y que era muy buena, así que la dejamos puesta.
Justo en el momento en el que en la película, alguien iba a ser asesinado, noté unas manos sobre mis hombros, di un pequeño salto y un grito ahogado, me giré y era Hayes.
Traía en sus manos una bolsa llena de cuencos de fideos chinos.
Nos dio uno a cada uno y cogió otros dos para ellos.- Esto no me gusta -dije.
- Me da igual -respondió.
- Vale, pero no me gusta.
- ¿Y qué? Cómetelo.
- No quiero.
- Que te lo comas.
- Que no quiero.
- He dicho que te lo comas.
- Y yo he dicho que no quiero - repliqué.Él me miró con la mandíbula tensada y apretando sus puños. Ahora mismo, yo tenía mucho miedo de que fuese a pegarme o algo parecido, y di unos pasos hacia atrás, para alejarme, debido a la cercanía.
Di otros pasos más y decidí subir a mi habitación a esconderme debajo de las sábanas y pensar en como podían cambiar las cosas tan rápido. Como el día anterior estaba tan feliz en una fiesta con Valeria, y ahora, secuestrada, con unas personas bastante extrañas, de las que una me pega y la otra simplemente no me habla, y en un sitio en el que no tengo ni idea de dónde está. No podía creerme todo lo que estaba pasando. Tenía que ser un sueño. Bueno, más bien, una pesadilla. Sí, las cosas podrían estar peor, pero no es nada agradable esta situación, no creo que a nadie le guste estar así.
Al cabo de unos treinta minutos tocaron a la puerta.
- ¿Puedo pasar? -preguntó esa voz detrás de la puerta.
Simplemente lo ignoré y no contesté.
Esa persona, al ver que no contestaba, entró y se sentó en la cama, y como yo tenía la cara tapada no podía ver quién era.- ¿Estás bien?
Lo ignoré de nuevo.
- ¿Estás bien? -volvió a preguntar.
- No, no estoy bien -respondí aún con la cara tapada.
- ¿Por qué?
- ¿Cómo que por qué?
- Sí, ¿por qué?
- ¡Estoy secuestrada! -dije después de destaparme y ver quién era.
- Lo sé...
- ¿Y si lo sabes por qué preguntas? Es de lógica que no voy a estar feliz en un secuestro.
- Sólo quería saber si estabas bien o mal, y si era lo segundo, cuál era la razón.
- Pues ya sabes que estoy mal y también la razón.
- Pero os estamos tratando bien, a ti y a Valeria.
- Tyler, me habéis -digo haciendo referencia a todo mi cuerpo- eso no es tratar bien.
- Yo no te he pegado, no podría.
- ¿Me estás diciendo que sólo me ha pegado Hayes?
- Sí.
- Eso quiere decir que él es el único que pega, ¿no?
- Correcto.
- Y también quiere decir que volverá a pegarme, ¿no?Tyler permaneció callado.
- Respóndeme.
Él siguió sin responderme.
- Vale, tomaré eso como un sí. Pero respóndeme a una pregunta.
- ¿Cuál?
- ¿Por qué estamos aquí? ¿Por qué justo nosotras y no otras personas? ¿Os hemos hecho algo? Si es así, lo siento, pero por favor dejadnos irnos, te lo suplico, no volveremos a hacer lo que sea que hayamos hecho.
- No te puedo responder a eso, al menos por ahora.
- Por favor... -supliqué una vez más.
- No puedo, lo siento.
- ¿Algún día saldremos de aquí?
- Sí, pero no sé cuando.
- ¿Cómo que no sabes cuando?
- Nosotros no somos los que controlamos eso.
- ¿En serio? -lo miré con cara de extrañada y el asintió- ¿entonces quién?
- Unos hombres que son como nuestros jefes.
- ¿Y ellos os dicen todo lo que tenéis que hacer?
- Sí.
- ¿Y por eso estamos aquí? ¿Porque ellos os lo dijeron?
- Mierda, ya te dije demasiado, no debería habértelo contado. No digas nada por favor.
- No te preocupes, igualmente no tengo a nadie a quién decírselo, sólo a Valeria, pero lo que quiero decir es que ese dato no saldrá de aquí; no tenemos móviles ni nada con lo que comunicarnos con los demás.
- Todo será más fácil si nos llevamos bien.
- No creo que vaya a llevarme bien con Hayes.
- ¿Por qué no?
- Porque si una persona me pega, lo último que voy a hacer es llevarme bien con él.
- Sólo hazle caso.
- No soy de ese tipo de personas.
- Los dos tenéis una personalidad demasiado fuerte.
- Lo sé, y eso es imposible de cambiar.
- Al menos intenta que os llevéis bien.
- Yo pondré de mi parte.
- Genial, gracias Ariana.Sonreí de lado sin mostrar los dientes y él salió de mi habitación, supongo que para irse a la suya y dormir, ya que era tarde, así que yo hice lo mismo.
Muchísimas gracias a @NotSxra_ por la portada, es increíble. Tenéis que pasaros por su book cover 💜