-Narra Ainoa.-
Me despertó un olor a comida, me levanté y me fui a la cocina, Harry estaba cocinando en boxers.
-Cochino, ponte algo. Que eso es para comer-le dije mientras me sentaba en la encimera.
-Vamos, si sé que te encanta-se acercó a mi y se colocó entre mis piernas y besó mi cuello. Sentía su "Milagro Matutino" cerca de mi zona, lo empujé y negué con la cabeza.
-Así no es Styles-me miró divertido y lo seguía con la mirada cuando se movía por la cocina, de aquí para allá- ¿Qué cocinas rulos?-pregunté moviendo los pies.
-El desayuno-sonrió de medio lado.
-Oh, ¿en serio? No lo sabía ni nada eh. Yo pensé que te hacias la cena a las...-miré el reloj de la cocina- A las 10 y media de la mañana-todo eso lo dije con un tono tan sarcástico que rió a carcajadas un rato.
-Vale... Cocino mis tan ricas tortitas con gofres y nata-abrí los ojos de golpe y me rugió el estómago. Una idea se me vino a la mente cuando él estaba echando la comida en un plato. Bajé de la encimera y él se giró a cojer una servilleta. Me puse delante de él y lo puse contra la encimera.
-Hmmm... Styles eres taaan guapo...-le dije besando su cuello de puntillas ya que era alto y él se estremeció, sonreí. Cuando tengo hambre hago cualquier cosa por comer.
-Vaya... Por fin te diste cuenta-creído, puse los ojos en blanco y mordí un poco su cuello, pero yo no quitaba ojo a aquella deliciosa comida. Hice como si lo abrazaba porque la comida estaba detrás de él. No se movía, parecía congelado. Aproveché y cojí el plato en un rápido movimiento.
-Gracias-le susurré al oido y me fui a comer mi ahora desayuno antes de que pudiera reaccionar. Cuando ya lo tenía medio acabado pareció reaccionar.
-Ei, te comiste mi desayuno-se cruzó de brazos y puso pucheros.
-JÁ, estaba hambrienta. Eso es la paga por todo lo que has hecho aquí-rei y me comi el último trozo.
-Eres mala-dijo con la misma postura.
-Claro, claro. Eso me lo dices ahora eh-le guiñé un ojo y dejé el plato en el fregadero. Me iba a mi habitación cuando llamaron al timbre. Fui a abrir y salté encima de Lucas besándolo, agarró mi cadera mientras yo me ponía de puntillas y nos besábamos. Paramos porque escuchamos una tos más falsa que los billetes de tres euros. Miré y estaba Harry, todavía en boxers, Lucas me miraba interrogante. Negué con la cabeza y noté como soltaba un suspiro de alivio.
-Qué parejita del año, ¿cómo os va? ¿Compro ya el traje para la boda?-preguntó Harry mientras se sentaba en el sofá.
-No somos pareja-le aclaré.
-Aun...-susurró Lucas pero yo lo pude oir perfectamente.
-Me voy a vestir, no os mateis en esos cinco minutos, anda-le di un beso a Lucas y me fui a duchar, a los dos minutos salí y me puse unos jeans vaqueros azulones, una camiseta medio transparente entre salmón y rojo de manga corta que metí por el pantalón y mis All Star bajas de color blanco. Al salir Harry ya estaba vestido, llevaba una camiseta negra, unas bermudas vaqueras y unas Vans negras y aparte, no había ni rastro de Lucas- ¿Dónde está?
-¿Quién?-dijo haciendose el loco.
-Una, no respondas mi pregunta con otra y dos, ya lo sabes bastante bien-puse los brazos en forma de jarra y él bufó.
-Está en el cuarto de invitados, no sabe lo que es una broma-se sentó en el sofá algo molesto.
-¿Qué le hiciste?-no cambié mi postura.
-Yo solo le hice creer que estaba enfadado con él y le hice: ¡Bu! Y salió gritando para ese cuarto-en sus ojos se notaba algo que no supe que era- ¿Sabes una cosa?-alcé las cejas esperando una respuesta- Él no te merece, necesitas a alguien quién te proteja, no que andes tu protejiendo-puse los ojos en blanco y fui a la habitación desocupada. Entré y parecía que no había nadie.
-¿Lucas?-lo llamé.
-Estoy aquí-dijo en un susurro.
-Sal, Harry está controlado. Era solo una broma-salió de debajo de la cama.
-Ya lo sabía-reí.
-Ya... Claro-sonreí y lo saqué medio a rastras de la habitación. Al llegar al salón Harry nos seguía con la mirada. Me senté entre los dos.
-Ainoa-me dijo Lucas- ¿Quie... Quieres ser mi no...no...novia?-susurró tartamudeando nervioso.
-Lucas... Yo no quiero relaciones por ahora. Así que quedamos solo amigos, ¿si?-asintió, noté que Harry se aguantaba la risa- Y tu rulitos, no te rias-achiné los ojos.
-Yo no me rio preciosa, es que esta escena es graciosa y me causa diversión-otra vez.
-¡Es lo mismo!-rió a mandíbula suelta soltando todo lo aguantado hasta ahora. Lucas se apretaba los puños. "Estúpidos con orgullo." Pensé- Bueno, es hora de que te vayas, nos vemos-acompañé a Lucas a la puerta y nos abrazamos. Harry se fue a su habitación bufando. Cuando iba a cerrar la puerta, Andrea entró.
-Hola amiga-sonreimos y nos abrazamos.
-Pasa, vamos a mi habitación. Ahora llevo algo para comer-asintió y se metió en mi cuarto. Cojí de la cocina una bolsa de patatas fritas y dos latas de Nestea al limón. Las llevé y puse todo encima de mi escritorio blanco, yo me senté en la silla de oficina con ruedas morada, Andrea estaba en el pouff blanco.
-Dios, te tengo que contar cómo es Harry en la cama-volqué los ojos y comencé a comer patatas- Es increíble. Y su lengua, ai su lengua. Es... No hay palabras-levantó las caderas y las dejó caer otra vez.
-Eres una cochina-le tiré un cojín que había por ahí.
-Dios, pero si tu te lo hubieras tirado... Tiene mucha experiencia. Tube cinco... No seis-levantó seis dedos-orgasmos en lo que tu te fuisteis y volviste. Es una máquina del sexo-le di el vaso de Nestea.
-Bebe que estás muy caliente-reimos y estuvimos hablando de nosotras y de lo que pensábamos hacer en nuestras vidas. Nos despedimos y empecé a lavar lo que ensuciamos. Harry me abrazó por la cintura.
-Sabes que entre yo y Andrea solo hubo sexo. Yo solo tengo chicas de una noche y ella también-me besó el cuello, con un pie lo aparté de mi.
-Rulos, será mejor por el bien de tus amiguitos-se tapó sus partes, yo rei- esos amiguitos no, tus rizos bobo. Que sé dónde duermes y puedes acabar podados-rei como una villana y me tiré al sofá a ver Sobrenatural.
-Vamos, si sé que me deseas-se sentó conmigo.
-JÁ, solo eres actractivo. No soy una de esas a las que estás acostumbrado. Conmigo lo vas a tener...-me froté la barbilla- ¿Cómo era el término adecuado? Ah si, imposible-arrastré las letras de esa palabra para que le quede claro. Rió por lo bajo- ¿Qué?
-Has dicho que soy atractivo-volvió a reir. Puse los ojos en blanco.
-Buenas noches salidillo. Esta vez prefiero dormir sola-pronuncié esa palabra lentamente- Hoy es domingo, mañana se empieza la Universidad-rei.
-Oh si, un montón de universitarias buenorras para mi-empezó a saltar en el sofá.
-Recuerda, hay muchas universitarias diferentes-volví a reir y me encerré en mi cuarto. Me quité la ropa y dormí en ropa interior porque hacía mucha calor.
--------------------------------------------------
Holi, me harían muy feliz si votasen y/o comentaran que os pareció, parece y si quereis que la siga.
Síganme en Twitter: @Ainoa20400 y Ask: @AinoaAmaya
Os quiere una Unicornia salvaje ♡.
