Language of Love - #INFINITE #Sungyeol

Parte 84

-no quiero que te controles – respondí mientras subía mis manos lentamente acariciando su pecho y me incline a su rostro para susurrarle en el oído que... que quería hoy convertirme en su...

-ya para! – Me dijo toscamente mientras sujeto mis manos y los separo de su cuerpo – no sigas- dijo agitado mientras me acostó en la cama y se puso encima mío.

Nuestros rostros estaban a una distancia de quince centímetros, mi cuerpo estaba paralizado de sorpresa y el suyo estaba agitado.

-lo siento, pero pensé que... – susurre , él se quedó en silencio observándome regulando poco a poco su respiración, yo saque mis manos de su agarre y me acomode la bata cubriendo así mis hombros descubiertos – lo siento – susurre y me incorpore en la cama alejándome sus brazos, el no menciono nada simplemente volvió a su lugar, yo baje mis pies al suelo y comencé a ponerme las sandalias torpemente ya que mis ojos habían vuelto a nublarse, me sentía humilla por haber actuado de esa manera y al final ser rechazada. Ahg! Porque tuve que hacer esa estupidez.

-¿A dónde vas? – me pregunto, yo no le respondí ya que si lo hacia él se daría cuenta que estoy llorando, me puse de pie y acomode la bata – mi ri... - soltando un suspiro pesado- tenemos que hablar

-mañana ¿sí? – Sugerí disimulando mi voz

***Sungyeol***

Vale, no quería separarla de ese modo, pero si la hubiera dejado continuar un poco más realmente no me hubiera podido controlar.

-pequeña- susurre para que ella volteara a mirarme pero me ignoro y se dirigió a la puerta
Piensa dejarme aquí?- me pregunte frustrado, me puse de pie y llegue a la puerta antes que ella se atreviera a abrirla –ricura escúchame- volví a mencionar ella desvió su mirada de la mía y comenzó a secarse sus mejillas con sus manos

-creo que necesito pastillas – comento despacio - creo que me dolerá la cabeza – intento disimular su voz quebrada
-te dije que no quería verte llorar – comente lo más suave posible
-y quieres que sonría? – me pregunto con su tono sarcástico mostrándome una sonrisa forzada que se iba desvaneciendo poco a poco – por favor me duele mi cabeza, permiso
-te traeré una pastilla yo, vuelve a la cama
-no quiero dormir aquí
-no hay otro dormitorio
-entonces estaré bien en la sala
-no salgas con eso... por favor vuelve a la cama
-para qué?... mejor dicho.. Porque me detienes? Ve, ve haciendo lo que te interrumpí, no me escapare de la casa solo estaré en la sala
-Diane. Por favor- esta vez mi voz sonó impaciente, esta niña era tan testaruda que siempre iba hablando y sacando conclusiones antes de tiempo
-¿enojado nuevamente?- me pregunto – o lo había olvidado, perdón por interrumpirte en tu tiempo, había prometido que no me metería en tu vida
-deja de decir eso, ya te dije tienes todo el derecho de meterte y armarme tus escenas de...
-No!, no tengo derecho... - me corto - porque todo lo que yo digo y hago te molesta! .. que voy a ser tu esposa?... sabes es lo más gracioso y absurdo que eh escuchado.
-de eso, exactamente de eso estoy molesto contigo, Que sigas continuando diciendo que ser mi esposa te pareces algo estúpido, gracioso y absurdo!! –le sujete del mano y la lleve hasta la cama, me senté en el borde de la cama y puse a Diane en frente mío.

Ella estaba desviando mi mirada apretando fuertemente sus labios

-tenemos que aclarar unas cosas- comente, pero ella aún seguía mirando a la lámpara que se encontraba cerca de nosotros – mi amor- susurre, jalándola para que se siente en mis piernas , ella coloco algo de resistencia pero una vez que la sujete de la cintura y la abrase cuando se sentó en mis piernas no dijo nada y solo apego su rostro en mi hombro y me rodeo el cuello con sus brazos, yo la abrase más fuerte y nos quedamos en esa posición un buen rato hasta que ella se separó de mi

-perdón por lo que mencione- susurro –pensé que estabas enojado por mi comportamiento de la mañana
-tus celos me gustan, pero no quiero que vuelvas a referirte de ese modo de nuestra relación- me acerque a ella y comencé a besarla despacio, sus labios eran tan suaves que hacían de mi mente pierda control de la realidad
-Yeol – susurro, entre mis labios y en ese momento pude sentir que ella quería pasar a otro nivel, su lengua rozo con la mía, era algo tan exquisito que sin poder aguantarme más a su tentación la acosté en la cama y comencé a besarla de una manera más excitada.

Sus manos que me rodeaban el cuello, volvieron a pasar por mi pecho y seguidamente a mi espalda, sus dedos comenzaron a jugar como hace rato sobre mi piel.

Mis manos abandonaron su cintura, una se dirigió a su rostro para poder guiar y seguir saboreando sus labios, mientras que la otra bajo hasta su rodilla, su piel era tan suave que poco a poco comencé a subirla lentamente hasta llegar a sus muslos