Language of Love - #INFINITE #Sungyeol

Parte 92

Llegue a casa, y lo primero que hice fue meter toda mi ropa en mis maletas, cuando termine me acosté en la cama y marque el número de Yerim. Le mencione que quería tener una reunión con ella mañana.

Al día siguiente me costó mucho convencerla a que cancele mi contrato no solo con la de Moon, sino con la agencia. Después de darle unas razones absurdas ella dijo que lo conversaría con el CEO, ese mismo día en la tarde tuve una reunión con el Ceo y Yerim, quien sin hacer tanto lio ellos aceptaron mi decisión pero con la condición a que termine mis actividades de los dramas antes de irme.

Los días habían pasado tan rápido, que ahora me sentí un poco triste cuando veía a Yura y a Alice, ellas no sabían que me iría, bueno si pero pensaban que solo era una pequeñas vacaciones que tomaría. A tres días de viaje mi corazón dolía más y sabía que el dolor sería más fuerte si veía a SungYeol, era por eso que hacia todo lo posible para no toparme con él en la agencia,

-¿Quieres que te acompañe a casa?- pregunto Kris quien caminaba a mi lado después de haber salido de la fiesta que organizo el director para dar finalizado al drama que trabaje junto a Kris.

-no, puedo ir sola – agradecí y mientras nos pusimos en el borde de la vereda

-estuviste actuando distinta durante esta última semana, ¿sucedió algo?

-no- negué - solo estoy un poco ansiosa por ver a mis padres – respondí

Cuando me despedí de él y llegue a casa volví a acomodar mis maletas, y ordenar la sala y comencé a cubrir con unas telas blancas los sofás ya que el día que me marche debería de devolver las llaves.

Esa noche después de cenar volví a mi habitación y al acostarme en la cama timbro mi celular, era un numero descocido, así que simplemente corte la llamada y lo volví a dejar en la mesita, al rato volvió a timbra levante el celular y conteste la llamada

-alo?...- hubo un sonido de música –Alo? - la llamada se cortó, volví a dejar el celular a su lugar pero volvió a timbrar, esta vez no lo conteste. Me tape con las sabanas y apague la lámpara hasta que nuevamente el celular timbro.

-alo?... – otra vez el silencio y la música alborota como fondo –alo?- repetí, no hubo respuesta y entonces colgué la llamada molesta

Al rato cuando por fin mis ojos se cerraron el celular volvió a timbrar, lo ignore pero volvió a sonar, ya molesta estire mi mano y levante el celular

-podrías por favor dejar de molestar! – Grite

-Di... Diane, lo siento pero... yo... soy Yura

-Yura? – pregunte, su voz sonaba muy distinta
-si... – sonó desesperada y seguidamente se escuchó el ruido de un cristal romperse, Yura soltó una leve exclamación

-donde estas Yura?- dije poniéndome más tensa -¿Qué está pasando?

-S... un...ye ol

-¿Qué?

-está actuando como un loco

-¿Qué?- volví a preguntar confusa – Yura por favor cálmate, no te comprendo ¿donde estas? – me incorpore en mi cama

- Ye... ye..., Yerim comento que tú te irías... y... y que habías cancelado tu contrato... -
-estás hablando con ella?- escuche la voz de Sungyeol en la otra linea

-Yura? –pregunte

-dónde estás? – Pregunto Sungyeol por la línea – respóndeme! Diane donde diablos estas!

-pásame con Yura

-necesito hablar contigo – su voz sonó distinto, lo cual afirmo que estaba ebrio – estoy en Octagon, quiero que vengas

-pásame con Yura

-quiero que vengas!!

-necesito preguntar la dirección a Yura así que por favor devuélvele su celular

-si no apareces aquí te juro que me comportare como completo idiota, Diane, así que más te vale que aparezcas– hubo un silencio hasta que Yura fue quien me contesto

-Diane?

-que haces con Sungyeol en Octagon? – pregunte

-vinimos todos, todo estaba normal hasta que Yerim comento sobre tu salida, y él comenzó a beber más, Kris intento decirle que ya no siga pero el...

-Kris también está allí?- dije sorprendida y molesta

-sí, vino a acompañarme

-ahg!...- tenía ganas de llorar, esto era tan estresante - estaré allí en un rato

El frio de la noche era aún más intenso en esta ciudad, y aun así era sorprendente ver a señoritas en este barrio llevar vestidos muy cortos y ajustados. Me acerque a la puerta principal del edificio Octagon, nunca había estado aquí pero su fama de esta discoteca era reconocida no solo en el país sino que casi era una de las mejores discotecas del mundo. Mientras me acercaba muchas miradas volteaban a observarme, no creo que sea porque yo era miembro de un grupo de kpop y me hayan reconocido, sino porque la combinación de mi ropa era una desgracia y no era adecuada para este lugar, me había puesto el primer jeans y la primera polera que había encontrado y llevaba un par de zapatillas.

Cuando llegue a la puerta mostré mi carnet temporal que había recibo de la embajada, el joven alto y robusto quien reviso el carnet y lo paso por una máquina, seguidamente la puerta se abrió y me permitió pasar, cuando ingrese al lugar era como ingresar a un mundo completamente diferente al que se veía en las calles, la música era muy alta y las luces de colores se movían de un lado a otro acompañados del humo, haciendo que mi visión tome su tiempo en acostumbrarse al nuevo ambiente, dirigí mi mirada a mis costados en donde se encontraban unos sofás rojos que estaban ocupados por unas pajeras que se iban besando, y al otro lado un grupo de chicas que iban bebiendo mientras se reían. Comencé a caminar entre la multitud en búsqueda de alguien conocido de la agencia, cuando de repente vi la silueta de Hoya en una de las mesas del segundo piso

subí las escaleras que tenían una forma de caracol que llevaban al segundo piso, y era cierto Hoya se encontraba en una de las mesas cerca de la baranda y frente a él estaba Yerim, antes de acercarme a ellos busque con la mirada entre las mesas cercanas cuando vi a Sungyeol a un extremo acompañando de un chica, mientras me iba acercado hacia él vi que Sungyeol estaba jugando con un vaso en la mesa haciéndolo girar hasta que la chica comenzó a acercársele más, al punto que sus pechos que resaltaban en su escote comenzaron a rozar con el brazo de él, Yeol no reacciono ante esa provocación pero tampoco se alejó de ella y eso me disgusto, me disgusto que permita que alguien... antes de terminar mi pensamiento vi como ella comenzó a darle besos en el cuello y acariciarle su pecho, al ver eso sentí como un golpe en mi estómago, ver esto era tan repugnante quise darme la vuelta e irme del lugar cuando de repente Sungyeol pronuncia mi nombre, yo voltee a mirarlo y él se puso de pie dejando completamente desconcertada a su amiga, al ver la expresión que tenía la chica me causo diversión en mi interior.

Sungyeol se acercó hacia mí con su mirada fija, claramente diciéndome a gritos que tendríamos una muy larga discusión, me sujeto del brazo e intento alejarme del lugar pero yo le rechace mo viéndome hacia un lado

-¿Dónde está Yura? – le pregunte disgustada
-vayamos afuera – comento mientras se inclinaba hacia mi rostro, yo me gire antes de que el llegara a cumplir con su objetivo de unir nuestros rostros y comencé a caminar de vuelta con dirección hacia la escalera, pero él me sujeto de la brazo toscamente y me volteo hacia él, nuestras miradas se unieron llenas de enojo hasta que el soltó un leve suspiro
-acompáñame – comento y sin esperar una respuesta mía me condujo entre las personas que están bailando y salimos hacia una pequeña terraza, el frio choco fuertemente con mi rostro y por fin Sungyeol me libró de su agarre

Él se acercó a las barandas y apoyo sus brazos en ella, yo me acomode mi polera e intente abrigarme del frio