Cartas A Una Vieja Amiga

Ultima carta

Querida extraña:

Me da gusto que te acercaras a mi. Ha sido el último día de colegio, y sabia que no te vería más en todo el verano, pero que bien se sintió tenerte en mate mis brazos, apretarte por unos minutos y sentir que no tendría que soltarte nunca mas. Qué pena que solo duró eso, unos minutos. Me abrazaste, y entre muchas palabras, dijiste que lo sentías, y que querías nuestra amistad de vuelta. Te diste cuenta que nada sería igual, pero aún así querías intentarlo. Emoción me dio cuando pude callarte la boca con otro abrazo, cuando me dejaste sentir tu calor de nuevo.

Bueno, creo que esta carta sería para agradecerte. Agradecerte por dejarme sentirme bien conmigo misma por al menos unos minutos. Te agradezco, por cada momento que me dejaste pasar junto a ti. Te agradezco, porque dejaste que supiera lo que es tener a alguien en quien confiar, y luego me mostraste que nada es lo que parece. Gracias, por hacerme caer, y por dejarme sentir derrumbada por lo que sentí, fue una eternidad. Bueno fue que me dejaras sola, así aprendí que nunca tuve a nadie. Nací sola, y sola muero. Gracias a ti, sé que soy solo yo, que en quien debo confiar más, es en mí y solo en mi. Me enseñaste a amarme a mí misma, y eso lo recordaré siempre. Me ayudaste en momentos difíciles, y eso nunca lo olvidaré. Pero he decidido parar. Decidí dejarte ir, dejarte volar. Gracias a todo lo que ha pasado entre nosotras, he descubierto que tengo que dejarte pasar, para sentirme bien conmigo misma. Si, te extrañare, te seguiré amando como siempre, y talvez siga llorando por ti, pero no suplicaré más. Ya no habrán más cartas, ya no habrán más mensajes borrados que nunca enviaré, ya no tendrás dedicaciones indirectas en mis libros, y parare de escuchar canciones sobre ti. Porque te amo... Y por eso mismo, te dejo ir. Pero antes, te dedico mi última canción, y con ella, te digo "adiós".

Att: Una extraña que te ama...