P.O.V Alice
No sé que ha pasado, lo ultimo que recuerdo es un camión descontrolado, un choque gigantesco y mi vista tornándose completamente negra...
1 año antes
Estaba durmiendo placenteramente en mi cama cuando siento una voz llamándome.
-Alice, despierta hija- dice mi querida madre en un susurro, pero al ver que no despierto, esto cambia completamente- Alice - Dice denuevo, esta vez subiendo el tono de voz- ¡¡ALICE!! - Dice gritando, haciendo que pegara un salto, cayendo finalmente de la cama.
-¡¿Que rayos crees que haces?!- le pregunto a mi madre, quien me mira con enojo.
- Despertarte, ¿no crees? Sinceramente no creo que llegar tarde tu primer día de instituto de muchas expectativas sobre ti- dice con un tono de voz tranquilo, que claramente escondía enojo bajo las palabras
Exacto, como escucharon. A mis extraños padres se les ocurrió mudarse justo cuando yo estoy pasando a ultimo año. ¡¿A que tipo de padres se les ocurre mudarse cuando su hija está pasando a ultimo año?! Ah si, a los mios. Resulta que mis padres son dueños se una gran empresa, llamada "Harrison's Enterprises" y que negociaba tanto nacional como internacionalmente. Estos negocios llevaron al cambio, que paso de una pacífica vida en New York, a una escandalosa vida en Los Angeles. Y aquí estaba yo, en mi nueva habitación siendo despertada para ir a mi nuevo instituto.
Caminé a paso lento al baño de mi habitación, para bañarme y arreglarme para el instituto. En cuanto llegué me empecé a duchar, llevándose el agua consigo casi todo mi estrés acumulado. Cuando salí me envolví en una toalla en camino a mi habitación. Ya ahí me puse mi ropa, que constaba de unos jeans ajustados, una blusa suelta color blanco y mis casuales converse negras. En cuanto al maquillaje, solo apliqué un poco de brillo a mis labios y muy poco rímel en mis pestañas, ya que usualmente no uso maquillaje, pues me gusta ir al natural.
Bajé las escaleras hasta llegar a la cocina, encontrandome con mi madre de espaldas cocinando hot cakes, a mi padre leyendo el periódico mientras disfrutaba de una taza de café y a mi hermano mayor Sam, comiendo unas tostadas.
-Buenos días- dije con un poco de mala gana, ya que no me apetecía para nada tener que ir a un nuevo instituto, donde no conocía a absolutamente nadie.
-¿ Lista para el primer día, Alice?- pregunta mi padre
- Si, claro - dije yo, sirviéndome un hot cake.
- Me temo que hoy no podré llevarte, así que lo hará tu hermano, que va de camino a la universidad- dijo mi padre, a lo que simplemente asentí. Creo que técnicamente ya estaba un poco acostumbrada a la "ausencia" de mis padres en mi vida debido al trabajo. Mi hermano siempre fue el que estuvo ahí para mi, cuando mis padres no estaban. Siempre nos hemos llevado bien con Sam, ya que el solo me lleva dos años, o sea que tiene 19. Sam es bastante atractivo a primera vista, no lo negaré, pero al estar conviviendo con el durante años te das cuenta de que pierde todo su encanto con sus acciones. No es que no lo quiera, pero es tipo chico que tiene una chica cada noche y además de eso, es un asqueroso. Solo mirenlo comer tallarines con salsa y se darán cuenta, sinceramente creo que a mi hermano le hace falta una clase de modales urgente.
Luego de terminar de desayunar salimos de la casa con Sam, hacia su auto. Mientras íbamos de camino al instituto empezamos a conversar para distraernos un poco en el trayecto.
