Síncope Y Transmisión

Ella sentía como las emociones brotanban por cada poro de su cuerpo al verlo, sentía algo de vergüenza al pensar que Yomo o Ayato se dieran cuenta, pero no podía ocultarlo más; fueron casi cuatro años de esperarlo, de imaginar ese momento; claro está que nunca pensó que Arima compartiría el momento con ellos.
¿Que debía hacer, abrazarlo, plantarle un maldito beso, irse...?
Pero otra vez él hablo antes que ella, era como si leyera la mente de Touka como si supiera que ella no sabía que hacer y él fuera a su rescate. Hundida en sus pensamientos oyó que sus palabras estaban dirigidas a su hermano y no a ella, acaso ¿no la vio o la ignoró? ese no era el rescate que espera, tal vez el no sintió lo mismo que ella, la idea de abrazarlo se volvio muy lejana en ese momento ni hablar del beso.
Él no se volteaba, maldición acaso el estúpido no pensó nunca en ella, era obvio que Kaneki ya había recuperado sus recuerdos de qué otra forma llamaría a Ayato por su nombre, pero esa tranquilidad que había aprendido en esos cuatro años se apodero de ella y le susurro
-déjalo, no es el momento ni el lugar, además él ya te abandonó una vez seguro esta vez también lo hará, es lo mismo actúa con indirectas: "quiere protegerte a ti y al resto. Él solo quiere morir, estúpido héroe trágico."
Ella solo asintió a sus propios pensamientos, pero al menos lo haría verla una vez ya que podría ser la última, así que lo llamó por su nombre; el que ella conocía muy bien.
-Kaneki.
Los músculos del mismo se tensaron él pensó que podía evitarla, ¿cómo mirar su rostro después de todo lo que sucedió?, él no pudo cumplir su promesa de no dejarla sola además ella tuvo razón en todas esas palabras que le gritó en aquél puente. Le dolía el mirarla era como ver todos sus errores que pudo evitar si supiera escuchar, la oyó, su cabeza se debatía en voltear o no, tampoco debía distraerse tenía a su "padre" delante de él, pero ella volvio a llamarlo esta vez sonaba decidida en pronunciar su nombre, no resistió más y solo ladeo la cabeza para verla sus ojos se conectaron, ella ya no era una niña hubiera seguido mirandola pero no debia de perder a su enemigo, ella entendía eso así que lo dijo.
- te veré más tarde ¿bien?
El solo pensó en ese momento cuando la dejó en la nieve en busca de poder para proteger a todos, pero él nunca volvio, no como Kaneki Ken al recordar el momento pensó que esta vez no sería diferentes y ella lo sabía, vio su silueta salir y no oculto su pensamiento.
-es usted muy injusta señorita Touka-. Decía su voz mientras su cabeza pensaba.-Pero esta vez no habra próxima vez, ganó usted diciendo las últimas palabras de la partida.
Durante los trancursos de la pelea de él y el escape de ella no podía pensar en nada más que sus pensamientos se equivoquen que si habría una próxima vez.