"... Estoy lastimando a mi bebé", decía entre lágrimas Olivia.
"Shhh... Liv... no es tu culpa..." le susurra al oído tratando de calmarla, ella no tenia la culpa de nada, a veces los embarazos pueden ser riesgosos, le dolía el corazón escucharla hablar así, había luchado tan duro desde que quedo embarazada por cuidar del bebé creciendo dentro de ella, a pesar del miedo que sentía por ser mamá hizo todos los esfuerzos por su bebé.
Elliot estaba sosteniendo a Olivia entre sus brazos, hace un minuto había llamado a la ambulancia, Olivia sentía tanto dolores que creía que en algún momento se iba a desmayar, pero estaba luchando, quería estar despierta para saber como estaba su bebé.
"Ugh...." Exclamo llevándose la mano al vientre "El.... me... duele.... mucho" se quejaba ella apretando su vientre, "el... el bebé esta sufriendo... puedo sentirlo", sentía un fuerte dolor en el vientre y sentía que su cabeza iba a explotar en cualquier momento.
"Ya viene la ambulancia nena... solo aguanta un poco más... bebé" susurraba Elliot, "quizás debería haberla llevado en auto a esperar por una ambulancia", pensaba Elliot, buscando soluciones, necesitaba hacer algo para ayudarla, o aliviar su dolor, solo que estaba completamente atado de manos.
"El... el bebé esta asustado... mierda", ella sentía como seguía sangrando entre sus piernas, Elliot se estaba asustando mas "estoy sangrando... mucho". Le decía en caso de que él no lo notara, pero era imposible, la sangre se filtraba de sus pantalones maternales.
Después de cinco minutos finalmente llegaron los paramédicos, Olivia estaba al borde de la inconciencia, si no fuera por el dolor que sentía , quizás no era tan malo desmayarse, pensaba ella, no sentiría el dolor y la angustia de su hijo en su vientre, entre los paramédicos y Elliot la pusieron en una camilla entre gemidos, rápidamente a la ambulancia, los paramédicos le conectaron un IV al notar la perdida de sangre, de esta forma iba a mantenerse hidratada a pesar de la perdida de sangre y fluidos.
"Manténgase despierta Olivia", le decía el paramédico que se encontraba a su izquierda, Elliot tomaba su mano y constantemente hacia círculos en la palma de la mano.
"... Por favor salve a... mi bebé" suplicaba Olivia entre sollozos tomándose su vientre y llorando.
Rápidamente llegaron al hospital, entraron a la sala de emergencia, Elliot trato de entrar con ella, quería estar con ella, estaba asustada, él también estaba muerto de miedo, pero una enfermera le prohibió el paso, dejándolo en la sala de espera "a penas tenga información vendré por usted" le menciono la enfermera, para su fortuna era la misma que los había atendido cerca de cuatro semanas antes.
Olivia estaba rodeada de médicos que la estaban examinando, escuchaba, pero no entendía nada, solo algunas palabras fueron claras para ella. "Peligro, sangrado y muerte" , usados en la misma frase, no se podía concentrar en lo que estaban hablando, la conectaron a un monitos para ver la frecuencia del bebé "hay sufrimiento fetal" informo el médico, mientras revisaba los gráficos impresos por la maquina, no entendía por que todo era tan confuso para ella, los médicos seguían hablando, pero no podía concentrarse, su visión estaba borrosa, busco el monitor donde estaba los latidos de su bebé y los de ella, podía ver a través de los gráficos su presión arterial estaba por las nubes.
Munch y Fin llegaron al hospital en busca de Elliot, lo habían llamado para confirmar que Olivia estaba bien, ahora estaban agradecidos de que Elliot era tan terco que fue a verla, de lo contrario Olivia y el bebé estarían muertos.
"Elliot, ¿como esta Olivia?", pregunto Munch acercándose a paso muy rápido a su compañero y amigo. Elliot movió la cabeza, tenia los ojos llorosos, "Olivia tenia mucho dolor... y sangraba mucho...", Elliot trato de sacar de su cabeza el recuerdo y el dolor de su novia, se suponía que estaba bien, había ido al doctor solo hace dos días, habían echo el amor la noche anterior, todo estaba bien, quizás si no hubiera accedido a tener relaciones con ella estaría bien, quizás si le hizo daño a su bebé, ella le había dicho que había sentido dolor.
