Los días se me hacían lentos y los minutos me sabían a décadas... No podía parar de pensar en él... Su nota me habia dejado perplejo, quería saber ¿dónde se encontraba? ¿Pensaba en mí? ¿En ese momento sólo era un recuerdo para él?, todas las preguntas se multiplicaban cuando recordaba que él ya no me escribía, ya no me seguía, y por más que lo intentaba localizar sólo me encontraba con sorpresas como el que su perfil había sido eliminado, y no sólo eso, sino cualquier contacto que tenía con él, ¿por qué? Cada vez que me lo planteaba me hacia sentir como una basura, me sentía usado, pero entonces ¿por qué la insistencia de buscarlo y encontrar su paradero?
Siempre me respondía a mi mismo diciendome que lo quería encontrar para desquitarme, para hacerle saber todo lo que me hizo sentir y reprocharle todo lo ocurrido, pero algo muy en mí decía que la verdad era otra... Que la verdad era que sólo anhelaba la sensación de sus brazos rodeándome y la existencia se sus besos sobre mi cuello.
Si, esa era la maldita verdad
Lo trataba de negar, yo no era así, de verdad que no, pero su rostro y la manera en que me tomó fue cómo... Cómo lo que quería... Como lo que yo necesitaba
Caminé en mi cuarto dando vueltas y vueltas, no me lograba consentrar, necesitaba hacer algo al respecto sino quería que acabara Matándome por la ansiedad.
Decidí buscar toda la información posible en todos los lugares a mi alcance pero jamás encontré nada.
Fue un día cuando leía repetidamente las palabras que se encontraban tatuadas en la delgada y fina hoja de maquina que me había dejado la última noche, que encontré unos pequeños bordes hundidos y manchados, como cuando escribes muy fuerte en una hoja y luego lo borras, se desvanece la mayor parte de lo escrito, sin embargo queda evidencias.
Tomé un lápiz frotándolo con tenuedad sobre el pedazo de papel, poco a poco los bordes hundidos fueron tomando forma de números
-¿Y esto?-
Tan rápido como la idea llegó a mi cabeza corrí directo a mi celular, lo tomé con ansias entre mis manos y empecé a marcar uno por uno los dígitos, mis manos temblaban, sin embargo, eso no me iba a detener. Con lentitud presione contra mi dedo la opción de "llamar"
Beeep... Beeep... Beeep
.
.
."¿Hola?"
Mi corazón se aceleró al escuchar de nuevo esa ronca voz la cual tanto soñaba encontrar de nuevo chocando en mi oído.
-¿Hola?- repitió con insistencia
-Seb... ¿Sebastian?-mis labios comenzaron a temblar
-Dios mio... E... ¿En serio eres tú?-su voz irradiaba un tono esperanzado
-Si... Yo... Busque la manera de contactarte por tanto tiempo...- de mi boca salían palabras que yo mismo no escogía
-Vlad... -mi cuerpo se estremeció- Te extrañé - un suspiro salió involuntariamente de mis labios
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Mi Acosador/Yaoi/Lemon
FanficEl 99% de mis fans son chicas, y con mucha razón, la mayoría de mis canciones son dirigidas a ellas, pero, ¿qué pasa cuando pongo atención a ese pequeño 1% de mi publico? Cosas asombrosas, es sorprendente lo interesantes que estos chicos pueden ser...