— El paro cardíaco fue inesperado. — dijo Deolanna repitiendo las palabras de el médico.
— Amiga, si necesitas algo, no dudes en decirme. — dijo Katherine, la mejor amiga de Deolanna. Después, colgó.
Rodric había dejado como herencia la escuela en partes iguales para Deolanna y Hungar. Ellos dos decidieron conservarla y ser co-directores.
— Hermano, ¿te puedo pedir algo?— dijo Deolanna
— Claro que si Deo— dijo Hungar
— Por lo que más quieras, no sigas con el idealismo machista de la familia Frank. Me gustaría que empezáramos a admitir mujeres, aunque no estén en el internado— sugirió Deolanna.— Tus deseos son órdenes— dijo Hungar con un tono animado.
Tres semanas después de anunciar la buena noticia, cientos de niñas, entusiasmadas, se incorporaron a la escuela.
Todas eran alemanas, exepto una, Ko Yon-Dash.
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La escuela para chicos
Mystery / Thriller¿Alguna vez te has preguntado porqué en algunas escuelas únicamente se permiten varones y en otras, mujeres? Bueno, pues en esta historia se encuentra la terrorífica respuesta.