Hola, soy Dalia Ferrer, tengo 17 años y gracias a que hace dos años nos tocó la lotería ahora somos millonarios. Mi madre Aurora es muy reservada y desde que nos hicimos ricos algo arisca, en cambio Álvaro, mi padre es más simpático aunque también algo despegado. Tengo un hermano dos años mayor que yo llamado Félix con el que comparto mis mayores secretos y al que quiero mucho. Vivimos en una casa a la que podríamos llamar "mansión" pero por sus dimensiones, no por las chorradas de casas encantadas ni nada de eso. A nuestro servicio tenemos a Concha (La cocinera) y a dos amos de casa, Lara y Gael (Este de 19 años) y con el que estoy encariñada, ya que lleva trabajando para nosotros desde que pudimos contratarles gracias al dinero de la lotería. Aunque ya no sea necesario que nos esforzemos en sacarnos una carrera para trabajar, Felix ha empezado su primer año y yo sigo sus pasos, ya que no queremos ser unos "don nadie" en esta vida que hoy en día nos presenta las cosas bastante difícil para los jóvenes interesados en hacer algo con nuestro futuro. Mi mejor amiga Sasha, resulta ser a la que hace años ignoraba y no podía ni ver. Aún no alcanzo a comprender porque el motivo de mi desprecio hacia ella, pero aunque me cueste reconocerlo, puede que la palabra exacta fuese "envidia". Las que realmente creía mis amigas, aprovecharon la primera de cambio para dejarme tirada y no han vuelto a contactar conmigo para algo que no fuese criticarme divulgando mis intimidades por las redes.
Aunque en general caigo bien a la gente, desde que nos tocó la lotería nadie se ha vuelto a portar igual conmigo. Esta es mi vida y os voy a contar mi historia...
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Unidos Como Uno
Teen FictionÉl el chico malo Ella la chica buena Él el chico fuerte Ella la chica débil Esa sería una típica historia de amor, pero esta no tiene que ver nada con lo típico ni lo común. - Hay que matarla - Lo sé, estoy dispuesto a ello si con eso consigo que...
