Snapchat

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—Un avión también denominado aeroplano, es un aerodino de ala fija, o aeronave con mayor densidad que el aire, dotado de alas y un espacio de carga capaz de volar, impulsado por ninguno, uno o más motores, bla bla bla —decía la maestra Astrid mientras yo la ignoraba y dibujaba en mi cuaderno  —señorita Lorens esta clase también es para usted, puede dibujar en otro momento, no quiere meterse en problemas conmigo —dice la profesora apareciéndose atrás mío

—como no quiere que dibuje si su clase es más aburrida que las charlas de la psicóloga —todos me volteaban a mirar y la profesora se sonroja de pena y después de enojo

—¿ah sí? ¿Quiere saber algo divertido? A dirección, ya —me dice y me levanto con relajo y camino a dirección

Toco la puerta de dirección, me dicen que pase y paso

—hola Rachel —le dije y me senté

—hay Michelle... Es tu tercera vez aquí en casi dos semanas que llevas estudiando aquí...

—pero Rachel, ósea, esa profesora es una aburrida, ¿dime de qué va a servirme lo que sea que estaba deciendo del avión? —le digo irritada

—Michelle cálmate, tu deber es estudiar y respetar a los maestros, y aunque te hagas de vaga yo sé que estudias, eres una chica con altas calificaciones, tienes una habilidad para entender las cosas sin tener que es escuchar todo lo que diga el maestro, pero tienes que respetar, tanto a tus maestros como a tus compañeros... Ya te dejé pasar las otras dos veces que viniste, pero esta vez no puedo Michelle, le tendrás que entregar dos ensayos a la maestra Astrid, uno sobre de lo que hablo en su clase desde que llegaste y otro sobre el respeto —me dice con autoridad

—ay, Rachel, es mucho para una persona —le dije molesta

—tienes que aceptar las consecuencias de tus actos... Puedes irte —hago cara de fastidio y me voy

~•~•~•~

Caminaba por el campus buscando a Sasha, no la veía desde ayer en la noche, salió temprano en la mañana y no estuvo en clases, y no se, me dio curiosidad saber que había echo todo ese tiempo.

Estaba desconcentrada pensando en muchas cosas y me tropiezo con las piernas de alguien y me caigo

—Dios mío, lo lamento —escuché su voz y supe que era un chico, y cuando me ayudaba a levantarme apenas y le vi sus hermosos ojos verdes —no te vi, en realidad lo siento mucho —dice mientras recoge mi bolso

—tranquilo, yo fui la que no te vi, ando en otro mundo... Por cierto, soy Michelle —le dije

—mucho gusto Michelle, me llamo Frederic —me dice y me dedica una sonrisa con su perfecta dentadura

Era alto, buen a cuerpeado, tenía cabello oscuro y como ya dije unos hermosos ojos verdes, muchos de los chicos de aquí eran así de lindos, claro que por alguna razón Frederic es aún más lindo que todos aquí

—en verdad lo siento... Ya se, te compraré una malteada aquí al final del campus para que veas que estoy arrepentido —me ruega

—jajaja, tranquilo, no tienes que hacer eso, te dije que no hiciste nada

—yo quiero invitarte, ¿vamos? —me sonríe tierno y voy con él.

Llegamos, me compró una malteada, y nos quedamos hablando ahí varias horas...

—después nos mudamos aquí y mi abuela se le dio la gran idea de meterme en clases de natación y....
—deje de escucharlo un momento apenas vi a Sasha caminando sola con la cabeza baja, parecía llorando, quería seguir hablando con Frederic pero tenía que ver a Sasha

—lo siento mucho, tengo que atender un asunto, en verdad me agrado estar contigo —le dije amable

—tranquila, tengo tu número y tienes el mío, hablamos y cuadramos vernos en otro momento —me dice.. ¿Eso fue una cita? Espera, Sasha primero, concéntrate... La fui a buscar y la logre alcanzar

—amiga, ¿dónde has estado?... —la vi secándose las lágrimas y le puse un mechón de cabello atrás de la oreja
—¿estás llorando? —se seca las lagrimas rápido

—no, yo no lloro... —dice y mira a otro lado

—estas llorando Sasha, ¿quieres hablar?

—amiga, soy un desastre, maldicion
—dice y llora más

—ven —la abrazo —tranquila, no lo eres... ¿Que pasó?

—pues me escapé en la mañana y salí con un chico con el que hablaba por Snapchat hace rato y nunca nos habías visto hasta hace unas horas... Y bueno, se aprovechó de mí y después solo se había ido... Soy una maldita zorra

—no digas eso Sasha, todas cometemos errores, tranquila, basta de llorar... Superaremos esto juntas, ok?

—está bien... —respira profundo —eres una buena amiga Michelle, gracias por todo..

—vamos, volvamos a la habitación

Buscando al chico ideal Donde viven las historias. Descúbrelo ahora