Buscando al chico ideal

Fontana

—Frederic tu madre siempre está ahí para salvarte.. Y esa tal Helena, tenía razón —le dije y le di la mano

El se acercó a mí y me dio un beso
—lo supe cuando te conocí

Venecia, Italia 2012, fin de año, 11:32pm

—no te pregunté porque te vi algo cansada.. Pero ¿por qué no fuimos a casa? ¿Qué hacemos en Venecia? —le pregunte a mi madre estando en un taxi que cogimos del aeropuerto

—tu padre nos quiso traer aquí porque quería que ustedes no siguieran su legado, quería que fueran mejores personas que él, y sabía que si nos quedábamos en Vancouver la gente que te secuestró iría tras toda la familia, pero solo fueron por ti, a la vez sabían que yo te iba a rescatar pero quisieron arriesgarse igual.. Te traje aquí hijo porque quiero que crezcas solo, y esperare a que tengas 17 para que te vayas a estudiar a Vancouver.. No te daré mi numero, ni dinero ni nada, acá tendrás otra identidad

—mamá, ¿estás segura de eso? Cuando tenga 17 ¿cómo sabrás dónde estoy? ¿O sí sigo aquí?

—porque cuando los cumplas quiero que vengas a este lugar —el taxi se detuvo en una Fontana.. Una fuente en español. —tu padre venía aquí, cuando era pequeño, cada vez que se perdía, no se sabía el camino a su casa pero si el camino hacia acá.. Yo lo conocí cuando éramos unos niños.. Aveces se perdía todo el día o solo 5 minutos.. —dice u hace una pause leve —tú sabrás cómo llegar aquí, aunque pase el tiempo, aquí vas a estar.

—así será —le digo y la abrazo.. Sin más pensar, me fui y ella también..

Se hicieron las 12 y me di cuenta que no tenía a quien felicitar.. Estaba solo, era solo yo.