La esperanza de un agujero negro

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Era un dia nublado, el viento trotaba rosando gentilmente a la gente con la que se cruzaba, las hojas rodaban lentamente en aquella ciudad apesar del clima lucia pintoresca, entre la danza del clima un café brillaba levemente, se pensaría que con ese clima habría bullicio en el café,mas parecía que todo pintaba tranquilamente como si nadie quisiera acercarse, en la calle solitaria una pareja caminaba apurada, un chico y una chica, ambos usando gabardinas.

Tras unos segundos se vieron situados enfrente del café, una puerta imponente de 3 metros se alzaba ante ellos con chapas de metal cuidadosamente pulido en forma de cabezas de lobo, la orilla de la pared que rodeaba la puerta estaba recubierta de piedra negra con las paredes hechas de rocas apiladas entre ellas mostrando algunas ondulaciones menores y mayores en algunas zonas, las ventanas medianas atravesadas por una cruz de metal con cristales azules, arriba de la puerta se mostraba un ventanal artesanal de una sombra tomando una manzana, la pareja se quedo expectante unos segundos a esa vista antes de entrar presurosamente, los truenos de lluvia empezaban a sonar a la lejanía con una furia que avisaba de una gran tempestad, dentro del café la pareja se despojo de sus gabardinas dejando ver a una chica de no mas de 23 años, de 164 cm de altura aproximadamente de cuerpo torneado vistiendo una blusa de cuello de tortuga café oscura, una minifalda azul turquesa con medias negras y botines negros, su tes era clara, sus labios eran tiernos de nariz chata con unas pestañas muy oscuras superadas solo por su cabello corto en melena con un mechón morado en su fleco y tenia ojos morados, alrededor de tres veces mas intenso que cualquier caso del síndrome de Alexandria, en cuánto se despojó de su gabardina el joven que los acompañaba la colgó procediendo a despojarse de la suya dando paso a ver que la gabardina escondía bastante bien su apariencia, el era musculoso de unos 175 centímetros de facciones robustas con cejas y pestañas pobladas de cabello negro con mechones blancos peinado elegantemente hacia atrás, vestia zapatos negros cuidadosamente boleados con un pantalón de vestir simplemente negro, un cinto oscuro con una hebilla cromada con la imagen de un tigre, camisa formal negra con los 2 últimos botones desabrochados y una cadena delgada de lo que cualquiera juraria que seria plata, se abrieron paso a la barra del café ocupando los dos asientos disponibles en ella, el café estaba lleno los camareros iban y venían presurosamente mas el barman estaba ahí sin mas que mirar a la pareja, después de unos segundos mientras la pareja observaba todo el ambiente el barman se les acerco.

desean ordenar algo?

Pregunto mientras limpiaba una taza de cristal transparente con una franela blanca.

La chica miraba el local como si estuviera buscando algo mientras el chico mira furtivamente a todos los comensales.

Caballero, desea ordenar algo?

Reitero el barman mientras posicionaba amablemente la taza en parte inferior de la barra, el chico apenas pareció escuchar las palabras del barman mientras seguía viendo furtivamente en el negocio.

Un ruso blanco para mi y una pantera rosa para ella.

En cuanto la chica escucho el pedido protesto enojada.

Desde cuando te sientes tan libre a mi lado?

Entonces que desea ordenar?

Repuso el barman mirando a la parte inferior. De la barra.

Solo ponle vodka a la pantera rosa y en ves de fresa que sean zarzamoras

Como dese

El barman puso manos a la obra mientras la pareja continuaban viendo furtivamente el lugar lo que parecieron no mas de 8 minutos los vasos se hicieron presentes en la barra en frente de cada uno de ellos.

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⏰ Última actualización: Jun 01, 2016 ⏰

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