Que hay de nosotros? (Chandler y tu)

Capitulo 2 - ¿ y tu quien eres?

Después de 15 min llegamos a la escuela. No es lugar más hermoso que digamos pero tampoco está tan mal, hay jardines verdes y flores de diversos colores. Los salones se ven muy bien. Cuando me bajé del coche me despedí con un beso de mi mamá y entré a la escuela. Todos se me quedaban viendo raro, algunos me sonreían, pero a medias, otras me barrían. Creo que no les agrada mucho la idea de la chica nueva.
Revise mi horario donde estaba el número de mi casillero, era el 321.
Cuando llegué a el dejé todos los libros que no iba a utilizar y me dirigí a mi primera clase, al menos algo bueno, mi primera clase era español, mi materia favorita, no voy a mentir pero era muy buena en español, en mi otra escuela era la primera de mi clase.
No encontraba el salón, sonó la campana y después de unos cuantos minutos finalmente lo encontré.
Cuando entré todos se me quedaron viendo raro. Me sentí tan apenada, tierra trágame.

-Señorita Brooks, llega tarde, por favor tome asiento... Chicos les presento a _______ Brooks, su nueva compañera, espero que la hagan sentir cómoda en su primer día.

Me moría de vergüenza, hubiera sido mejor que no me presentara.

Me di cuenta de que ya no había asientos al frente, normalmente me gustaba sentarme ahí para no perderme de nada.
Tuve que sentarme hasta atrás junto a un chico de cabello largo que estaba prácticamente dormido así que no se dio cuenta cuando me senté.
El profesor empezó la clase de nuevo, saqué mis libros y empecé a tomar nota. El chico que estaba a mi lado se despertó y creo que se espantó un poquito al verme de repente junto a él y además no me conocía.
El profesor puso unas oraciones que debíamos completar, para mí fue pan comido así que termine rápido. Noté que mi compañero de a lado tenía problemas.

-Sam, me ayudas? -dijo él, volteándose a ver a un chico rubio.

-Yo tampoco puedo.

-Señor Riggs, hay algún problema allá atrás? -interrumpió el profesor.

-No señor.

-Muy bien entonces continúe con su trabajo.

Pensé en ayudarlo, no perdía nada, pero nunca se me dio bien el hablar con niños, me ponía nerviosa y nunca sabía qué decir. Pero algo me hizo hablarle y ayudarlo con su trabajo.

-Te ayudo?

-Emm...creo que sí, no soy muy bueno en español -me dijo apenado.

-Yo sí,- sonreí -entonces quieres que te ayude?

- Sí, gracias. -Extendió su mano hacia mi - Soy Chandler y tú eres...

-________dije bajando la cabeza