A la primera semana ya te ganaste el título de "guaperas" en nuestro curso, pero hay que reconocer que te lo merecías.
¿Quieres saber algo? Adoraba cómo te quedaba esa sudadera negra, hacía que se te resaltara el color de los ojos. Ese color chocolate que hacía que me perdiera en ellos.
Siempre ibas a la cafetería junto a los más populares del curso, básicamente por que tú ya te habías convertido en uno de ellos, eras uno de los populares. Y bueno, siempre estabas rodeado de chicas altas, delgadas y tremendamente guapas. Era más que obvio que jamás ibas a fijarte en la chica que se sienta detrás de ti en historia, esa chica que mide metro sesenta y no está tan delgada como las barbies con las que te juntabas.
Pero daba igual, porque aunque tú estabas ahí junto a los más populares yo estaba sentada en la mesa del fondo junto a mi mejor amiga, la misma que mientras me hablaba yo sólo podía pensar en tu sonrisa y en la manera que gesticulabas y movías las manos de un lado para otro cuando hablabas. Qué puedo decir, símplemente me enamoraste desde el primer momento que te vi.
Y me había enamorado de ti, me había enamorado de Scott Edwards.
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YOU
RomanceÉl era duro como el hielo, y yo por desgracia me derretía por culpa de su mirada.
