Una de las cosas más difíciles de la vida es conocernos, saber quiénes somos, definir eso que llaman "personalidad", "orientación", cuando finalmente lo haces, te conoces, ha pasado tanto tiempo que podríamos decir que es directamente proporcional a la cantidad de errores cometidos.
Mi historia se centra en la vida de un joven homosexual. (hecho de la vida real).
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Andrés un niño de 10 años, aún con su corta edad ya sabía que le gustan los chicos, solo eso tenía claro, pues al ver a otro niño, le parecía atractivo y para el era algo bueno, es un niño como la mayoría de su edad, estudiante, hijo, nieto, sobrino, y como en la mayoría de las familias homofobicas, ocultó su orientación y se internó dentro de sí mismo viviendo dentro de un armario que para su edad era un pequeño armario.
Y con respecto a Su familia? Era Terriblemente disfuncional ya que eran; cristianos evangélicos, alcohólicos, drogadictos, mafiosos, por lo cual era algo difícil elegir a cuál de tantos ejemplos seguir, pues finalmente el lo único que necesita como todo niño, es tener un modelo a seguir, y es allí donde elige ser Cristiano Evangélico, como su abuela y como algunos de sus tíos, para el ir a la iglesia era su preocupación.
¡Agradar a Dios era su pasión!
Ser líder era su trabajo y quería llegar a ser un gran Pastor pues ese era su sueño, Andrés crece en ese ambiente, muy alejado de lo que sus pensamientos ya le estaban señalando
-"Ese chico es muy lindo"- pensaba al ver chicos atractivos.
Aunque para el ese pensamiento era del enemigo (el diablo).
Al pasar de los años lleva su vida encaminada a ser un gran Pastor. A sus 15 años ya dirigía uno de los grupos de jóvenes más numerosos y aguerridos dentro de la iglesia, sus pastores lo veían como un buen prospecto de líder, hasta el mismo llego a creer eso, pero por más que este ocupado.
¿Que paso con los pensamientos?
ellos seguían allí, vivos presentes y a medida que Andrés crece, esos pensamientos del enemigo crecen, y como si fuera poco, vivir en la era "ínter conectados" le hacía la tarea más difícil, pues entrar a las salas de chat que en el momento son la sensación era muy sencillo, de hecho la primera que vez que entro a una sala de chat fue irónicamente en la misma iglesia, pues la visión de negocio del pastor lo llevó a tener un ciber café en la misma iglesia.
Entrar en esos sitios de chat eran ya el día a día de Andrés, Un día como cualquier otro en esas salas de chat el enemigo le mostró un link que decía.
-chat gay-
Al leerlo se pone muy nervioso, su corazón se aceleró, estaba a un solo clic de entrar en lo que tal vez sería el infierno, pero aún así Andrés no tardó mucho en entrar a dicha sala de chat, ventanillas mínimas donde solo se escriben y no se ven fotos empezaron a emerger.
-¡Vaya esto empezó a ser divertido!- pensó muy en el fondo
Y a la par de esto seguía siendo el líder ejemplar, Aunque sentía que estaba engañando a otras personas, No presto atención pues a esa edad la adrenalina y las hormonas hacen estragos en el cuerpo y en la mente.
Y en este punto ya sentía que estaba viviendo dos maneras diferentes de ser.- estoy en el chat soy el Andrés gay y el resto del tiempo soy el líder de la iglesia- pensó mientras se analizaba a sí mismo.
Y ahora su sueño de ser pastor ya no era tan claro, en este punto el se preguntaba una y otra vez.
¿Porqué tenía que sentir esas cosas?
¿Por qué tenían que gustarle los niños?
Se cuestionaba a si mismo mientras pensaba que para el resto de las personas que lo rodeaban lo normal y aceptado era que le gustaran las niñas, Andrés vivió días crueles.
Pues le preguntaba constantemente a Dios ¿por qué yo?
Su vida se había convertido en un infierno, fingiendo, mintiendo, pensando en algunos momentos que era un ser cochino y poco digno de ser llamado "hijo de Dios", a esto podríamos agregar que su familia era completamente conservadora, no había en él una vía de escape a esa edad, solo tenía que vivir ese infierno por sí mismo, solo podía desear que cada día terminará rápido, vivía sumergido en actividades que no lo dejaran pensar, que no lo dejaran entrar a una sala de chat, finalmente el ser gay era lo que estaba mal según su propio criterio.
Estudiar, trabajar y ser líder de la iglesia, no le daba tiempo de nada más, eso que él pensaba era tan incierto, un día de camino a la iglesia en el subterráneo, Andrés vivió uno de los episodios más extraños de su vida; un niño con evidente inclinación homosexual se sentó justo a su lado, pasados algunos minutos ese niño comenzó a tocarle la pierna hasta llegar a su pene, fue una situación demasiado incómoda y quedo frío, se puso muy nervioso y se levanto de inmediato del asiento, en el momento en que se levanto se dio cuenta que su pene estaba erecto, ese día fue traumático e inexplicable.
Y poco a poco Andrés se dio cuenta que su gusto por los niños iba más allá solo de un chat, más allá que una pequeña aventura Cibernética.*si les gusto el primer capítulo del libro que estoy escribiendo síganme y estén pendientes para que no se pierdan cada vez que suba un cap nuevo* ;)