El corazón no olvida [Editando]

Nos encontraron...

Ni Yu-Gi-Oh! Ni ninguno de sus personajes me pertenecen, estos pertenecen al gran maestro Kazuki Takahashi y Katsumi Ono♥.

¡Hola chicos! Hoy les traigo un capítulo más de esta historia y temo decirles que en dos capítulos más llegará a su final :') como había dicho desde el principio sería un fic muy corto, así que espero que disfruten los últimos capítulos :D

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

"Usted no sabe cómo yo valoro su sencillo coraje de quererme".

A la mañana siguiente desperté muy temprano, había descansado muy bien, supuse que era por Yami, bueno, la verdad es que eso era obvio...

Me sentí extraño puesto que no sentía el calor de Yami así que palmeé a mi lado para buscarlo dándome cuenta que él no estaba, me levanté de golpe sentándome para mirar a mi alrededor, se me hizo muy extraño, pero bueno tal vez se había levantado antes y estaba haciendo algo.

Con cuidado traté de levantarme, el pie aún dolía, pero ya no era tanto como al principio. Salí de la tienda y vi que Yami estaba frente a la fogata cocinando algo.

-Yami... -Lo llamé desde la entrada de la tienda haciendo que él se volteara rápidamente a verme y viniera hacia mí.

-Mi ángel, buenos días -Dijo llegando a mi lado depositando un dulce beso en mis labios, era una linda forma de despertar, se sentía tan bien.

-Buenos días -Dije sonriéndole después de que nuestros labios se separaran -¿Qué es lo que haces? -Pregunté intrigado.

-Preparaba algo para que desayunaras -Respondió sonriéndome con alegría.

-No te hubieras molestado -Mencioné apenado, nadie había hecho ese tipo de cosas por mí antes.

-Tranquilo, antes también solía hacerlo, claro que, en mi casa, solía hacerte pancakes de desayunar cuando acampábamos -Dijo pensando, luego volvió a sonreír. Ahora entendía que ese tipo de cosas lindas ya alguien las había hecho por mí, me sentí feliz de saberlo, pero otra vez triste por no recordar esas cosas, sin embargo, esta vez disimulé un poco mi sentir.

-Entiendo -Dije sonriéndole levemente -¿Y qué es lo que cocinas ahora?

-Pues... estoy improvisando, no traje muchas cosas, pero espero no sepa tan mal -Dijo apenado.

-Lo estás haciendo tú, no tendría por qué -Dije sonriéndole de una forma más sincera, él asintió feliz.

-Terminaré y lo traeré -Dijo sonriéndome -No te esfuerces ángel. No hace falta -Dijo feliz, yo asentí a sus palabras y volvía a sentarme.

Era una cálida mañana, a pesar de que estábamos perdidos no se sentía como tal, pero en parte estaba preocupado, era viernes, era el día en que se suponía debíamos regresar a nuestras casas, peor aún, no sabía cómo estarían mis amigos al ver que no aparecía.

A los pocos minutos regresó mi Yami con un plato de comida en sus manos, en serio que era muy precavido, a mi jamás se me hubiera ocurrido traer un cuarto de las cosas que él había traído.

-Oye Yami... ¿Crees que nos encuentren pronto? -Pregunté algo afligido, no podía evitar pensar en Ry-chan y Mariku-chan.

-¿Cómo? ¿Acaso no te gusta estar perdido conmigo? -preguntó sonriéndome.