capítulo 27

43 3 1
                                    

El sonido del grafito sobre el papel me despertó, abrí los ojos poco a poco y me sorprendí al encontrar a Alexander dibujando en un silla frente a mí.

Los volví a cerrar

-Creo que thomas me drogó y tengo alucinaciones-
Dije tomando mi cabeza que dolía horriblemente

-Al menos a tí te drogó, a mi me golpeó con un bote de pinceles-
Alce la vista y la mano para tocar su cara con mi dedo

-Estás aquí?-

-Sí, encontrá de mi voluntad por supuesto-
Miré sus labios tan rotos como los míos

-¿Porqué no has escapado?-

-Lo intenté, está todo cerrado muy bien cerrado y bueno...soy un artista, no me considero la persona más fuerte del mundo-

-Pero...tu tienes...-
Miré su cuerpo en una señal obvia

-Tener un cuerpo esculpido no quiere decir que sea capaz de romper una puerta de metal-
Miré la puerta...

Rayos!

-Una ventana quizá?-

-Tienen barrotes-
Cerré los ojos

-Cómo es posible que te haya podido... -

-Estaba intentando pintar pese a los gritos del italiano, ese tipo no dejaba de gritarles a todos preguntandoles en dónde rayos estabas, entonces decidí pintar mejor en el patio y llevé conmigo un gran frasco donde guardo mis pinceles, estaba dando los toques finales a tu ca...-
Carraspeo

-A un árbol cuando sentí un fuerte dolor y todo se volvió negro, desperté en el auto del novio de Maki y me dijo que me estaba secuestrando para que la persona que había secuestrado antes de mí no se sintiera sola-
Reflexionó un poco

-Ahora que lo pienso creo que los gritos de Jean estaban justificados... y El novio de Maki es demasiado... Extraño para secuestrar incluso me preguntó si me había amarrado demasiado fuerte-
Meneo la cabeza y me miró

-así es él-

-Sensible?-

-No, se preocupa mucho por los demás aunque intente con todas sus fuerzas ocultarlo y parecer frío-

-¿Porqué hace eso?-

-A Maki le gusta así, él haría cualquier cosa por ella-
Lo miré y el negó

-El amor es tan extraño-
Asentí

Me miró, miró su dibujo, suspiró negó con la cabeza y lo colocó en la mesita de mesa

-Ya no tiene caso seguir fingiendo, ven acá-
Extendió sus brazos y no dude en levantarme y acurrucarme en su pecho aspirando su aroma

-Perdoname Alex-
Susurre con un poco de dolor

-Shhh eso ya no importa-
Estuvimos acurrucados, recuperando el tiempo perdido

La respiración acompasada de Alex me dijo que se había quedado completamente dormido y me safe de sus brazos para inspecciónar la casa

Todo estaba curiosamente cerrado, las puertas eran de metal y las ventanas tenían barrotes claro que el metal no era tan evidente, era una especie de puerta reforzada.
al menos la cocina estaba llena de alimentos, hice una tortita española y sumo de naranja para almorzar al ir terminando de hacer el zumo unas manos rodearon mi cintura y un mentón se acurruco en mi hombro.

-Huele delicioso-

-Espero que este igual, la última vez que intenté cocinar terminé casi envenenando a Maki-
Soltó una risita

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 31, 2016 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Tristes AlmasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora